M.A.
En respuesta a la preocupación surgida entre los vecinos, la Conselleria balear de Medi Ambient se desplazó ayer hasta Eivissa para explicarles en persona cómo se ejecutará el proyecto de los pozos de Talamanca y dejarles claro que la actuación no afectará al acuífero de agua dulce que abastece a las viviendas de la zona, como los residentes temían. En la reunión, a la que asistieron vecinos de Jesús, Talamanca e Illa Plana, el secretario general de la Agència Balear de l'Aigua i la Qualitat Ambiental, Miquel Costa, garantizó que «los pozos se harán mientras no afecten a la parte del acuífero». Según detalló el jefe general del Servei d'Estudis i Planificación de la Direcció General de Recursos Hídrics, Alfredo Barón, «el factor fundamental es no pasar la zona de falla que hay en la zona y no meternos en los sedimentos de relleno cuaternario que son los que tienen el acuífero de agua dulce». En principio está previsto hacer dos pozos, además del que se hizo de forma experimental, y « un tercero que estará condicionado al resultado de los dos primeros en cuanto a caudal y en cuanta a la situación respecto a la falla». Con una profundidad entre los 150 y los 180 metros, los pozos, que abastecerán a la desaladora de Eivissa, tendrán cementados los primeros veinte metros para asegurar que no entra nada de agua dulce.
Para ofrecer todas las garantías, la Conselleria de Medi Ambient acordó ayer que, además de la supervisión técnica del Govern a través de Alfredo Barón, la ejecución de los pozos contará con la supervisión y la dirección de Bartomeu Escandell, el ingeniero de Minas que en 1993, a petición de los vecinos, realizó un informe en el que alertaba al Govern que los pozos previstos entonces junto a la central eléctrica afectarían al acuífero de agua dulce. Asimismo, está previsto hacer una red de puntos de control en ses Feixes para saber a través de estas pequeñas perforaciones cómo está el nivel de agua y el nivel de salinidad y si se afecta o no al acuífero.
Las explicaciones de Medi Ambient dejaron más tranquilos a los vecinos, como reconoció el presidente de la asociación vecinal de Jesús, Joan Costa: «Por lo menos hemos tenido una información clara del tema y, de momento, con los acuerdos que se han adoptado y sabiendo que la obra contará con la asistencia técnica del ingeniero Bartomeu Escandell nos quedamos francamente más tranquilos».