La agrupación Morgana Teatre ofreció ayer en Can Ventosa su particular versión de una de las obras cumbres de la literatura española, La Celestina, de Fernando de Rojas, en lo que los propios intérpretes han denominado como una adaptación modernizada que llega más fácilmente al público joven por ser «más ágil, dinámica y corta, reduciendo las tres horas de la obra original a casi una y media», según explicó Xisca Bibiloni, quién encarna a la alcahueta Celestina.
No obstante, el texto se ha respetado en castellano modificando el lenguaje medieval, pero manteniendo los insultos que caracterizan este clásico de la literatura castellana.
Valiéndose tan sólo de dos rampas de madera como decorado, diversos juegos de luces y ropajes de época, los cinco intérpretes en la piel de Elicia, Calixto, Melibea, Sempronio y la Celestina derrocharon sensualidad y dramatismo sobre el escenario, en una versión adaptada de Fernando de Rojas en la que toda la fuerza radica, según sus actores, en «la parte carnal, sensual y sexual», llegando a ser muy explícita y picante en ciertas escenas, lo que despertó algún rumor de los asistentes. Entre ellos casi 400 alumnos pertenecientes a institutos de la isla que siguieron atentos cada diálogo de la función.
Irene Luján