B. ROSELLÓ
Esta cifra de más de un centenar de licencias podrían ser concedidas en cuando la administración municipal creyera conveniente, ya que ninguno de los municipios de Eivissa llega al cupo total de vehículos, según el cálculo que se realiza en relación al número de habitantes y las plazas turísticas existentes.
Las 132 licencias que aún están pendientes de conceder ha sido la base para que el Consell Insular duplique este año el número de licencias temporales para el mes de agosto, como ya avanzó este periódico. El conseller resaltó que las 59 autorizaciones vigentes para el mes de verano permitirán realizar 86.800 viajes, «50 viajes por día y taxi», según explicó Guasch. En caso de que el municipio de Eivissa vuelva a rechazar las licencias, tal y como ya hizo el año pasado, el número de viajes se reducirían a 52.700. «Prácticamente se duplicaría la cifra de 2006, cuando se realizaron 31.000 servicios», explicó.
En cuanto al reparto por municipios, Eivissa contaría con 22 autorizaciones, Sant Antoni con 13, Sant Josep con 11, Santa Eulària con 10 y Sant Joan con tres, según la información facilitada por el Consell Insular. En relación al sistema de adjudicación a solicitantes, en el orden de preferencia se destaca en primer lugar a los titulares de autorizaciones estacionales en 2006, «debido a las inversiones que realizaron el pasado año»; los titulares de licencia municipal de taxi que acrediten contratación de asalariados; los titulares sin contratación de asalariados, y, en último lugar, los asalariados de un titular de licencia municipal. Por todo ello, el conseller Diego Guasch instó a los taxistas del municipio de Vila a presentar sus peticiones aunque el ayuntamiento lo rechace: «Siempre puede existir un cambio de criterio después de las elecciones y en ese caso los taxistas de Eivissa podrían tener licencias temporales». Según el responsable del departamento del Consell Insular, el pasado año desde el municipio de Eivissa se presentaron 35 solicitudes, que finalmente no se concedieron debido a la negativa del Consistorio.
Con esta medida, el Consell Insular asegura que se controla el intrusismo del sector «ya que las 59 licencias que salen a la calle harán los servicios de los taxis pirata», apuntó y resaltó que se intentarán «aplicar otras medidas para fomentar el transporte público que sean complementarias a los taxis temporales».