JOSÉ LUIS MONTOYA
Candidatos y simpatizantes de la coalición PSOE-Eivissa pel Canvi protagonizaron ayer en el parque Reina Sofía de Eivissa una concentración reivindicativa en favor de una campaña electoral limpia y «sin cartas trucadas». El acto contó con sendos discursos del candidato a presidente del Consell Insular, Xico Tarrés, y el número dos de su lista, Albert Prats, quienes instaron al electorado progresista a no hacer caso de las «mentiras» y acudir a las urnas el próximo día 27.
«¡Ya está bien de mentiras, queremos otra manera de hacer política!», proclamó Xico Tarrés arropado por varios centenares de personas. «Basta ya a una campaña basada en mentiras y rumores. Las reglas de la campaña electoral están marcadas y esas reglas no son las de las cartas trucadas con las que el PP quiere que juguemos», aseguró el candidato, quien aseguró que en el PP están «agresivos» porque «saben que en Eivissa se prepara un cambio político».
«El PP está agotado. Su discurso está obsoleto, no sólo en Eivissa, sino en toda España, y por ello su táctica es inventar mentiras y distraer la atención. Ya lo hicieron con el '11M' y ahora lo están aplicando a pequeña escala en todas las comunidades autónomas donde tienen miedo de que los votantes les den la espalda», añadió para remarcar la idea de que los candidatos de su coalición «no tienen nada que esconder. Somos gente honesta, que estamos en política porque creemos en las personas y en una Eivissa mejor y no para defender intereses particulares.
Por su parte, Albert Prats, renovó públicamente el apoyo de Eivissa pel Canvi al PSOE y denunció la«actitud prepotente, dictatorial, abusiva, corrupta y, en reiterados casos, de nepotismo del PP» durante la última legislatura.
Prats aludió a la polémicas, como la adjudicación de obras en el Consell a una empresa vinculada al hermano de Pere Palau o a la imputación de varios alcaldes del PP en casos judiciales, entre otros escándalos, para contraponerlo a la campaña de «mentiras y difamación» que pretende desmovilizar al electorado progresista. «El PP no cree en la democracia ni en la justicia, ni en el debate de ideas porque no tienen ideas», dijo para concluir: «por cada insulto haremos una propuesta en positivo».