El Consell aprobó ayer sancionar con más de 100.000 euros de multa tres establecimientos turísticos por incumplir la normativa. Se trata del establecimiento Hotel Happy en Allà Dins, al que se le ha multado con 60.000 euros por funcionar como alojamiento turístico sin contar con el permiso preceptivo, Pizza Luego CB con 30.000 euros por ofertar servicios de restaurante sin licencia y el hotel March con 13.000 euros. En este último caso la multa se debe a ejercer la actividad sin haber notificado el cambio de titularidad de la explotación y no prestar servicios para los que tenía permiso.
El conseller de Turismo en funciones, José Torres, resaltó el trabajo de inspección que ha realizado el Consell durante esta legislatura. «Desde que soy conseller no ha habido ningún pleno en el que no se aprobase alguna sanción por competencia ilegal, por hacer un mal uso de la autorizacion turística o, porque, en definitiva, no se cumplía la normativa turística», destacó Torres, que recordó que en el pleno anterior también se aprobaron sanciones a un par de restaurantes y al hotel Catalina -con multa de más de 60.000 euros- por funcionar sin permisos.
Estas sanciones fueron aprobadas ayer con el voto favorable del PP y la abstención del Pacte, que se negó a discutir los puntos y se abstuvo en todos porque consideró que un gobierno en funciones debe dejar el máximo número posible de asuntos sin aprobar para que sean tratados por el equipo entrante.