na decena de pequeños del municipio de Sant Miquel inauguraron ayer por la tarde en las instalaciones deportivas del Colegio Público Balansat el nuevo curso de la escuela Ibicirco, que se prolongará hasta mediados de junio. En esta primera toma de contacto los padres de los niños pudieron acudir a una demostración de las actividades que los alumnos de entre seis y doce años realizarán durante todo el curso y los interesados en continuar, pudieron formalizar la inscripción. De cara a este nuevo año, también se incorporarán a las actividades de la escuela una serie de cursos de vestuario, maquillaje, magia, teatro, música y mimo. Tampoco se dejará de lado el manejo del diavolo ni los malabares con bolos.
Según Brian, de quien surgió la idea de abrir esta escuela de circo, «la idea es que los niños monten su propio espectáculo y encuentren su propia voz en el escenario haciendo lo que más les guste. Algo así como lo que hacen los artistas del Circ Du Soleil». Marcela, secretaria de la escuela, comenta: «Estos cursos deben ser considerados como cualquier otra actividad extraescolar. No significa que los niños vayan a ser payasos o artistas de circo de mayores pero esta es una muy buena manera de perder el miedo, ganar autoconfianza y forjarse una personalidad propia». Los lunes, los alumnos podrán practicar sobre unos pequeños zancos, que irán aumentando progresivamente de tamaño. Aunque les resulta un tanto difícil mantener el equilibrio, lo cierto es que pasados unos veinte minutos la mayoría de alumnos ya los dominaba. Sin embargo, éstos provocaron alguna que otra caída sin importancia que no les impedía volver a levantarse y continuar su andadura en las alturas.
Los alumnos que participaron en la clase de ayer también pudieron practicar el arte de andar sobre una pelota, así como otras muchas acrobacias y malabares bajo la atenta supervisión de los profesores de la escuela. El próximo viernes, los alumnos podrán especializarse en la práctica sobre la tela, un tipo de acrobacia aérea sobre una tela de cuatro metros cuadrados.
Ibicirco está buscando nuevas ubicaciones para llevar a cabo sus clases en Vila y Sant Antoni entre miércoles y jueves ya que hay un gran número de alumnos interesados en participar en estas clases y que consideran que Sant Miquel se encuentra en un lugar demasiado alejado. En este sentido, Ibicirco también está buscando patrocinadores y una ubicación más estable. Dentro de seis semanas, aproximadamente, celebrarán un festival con distintos números preparados por los alumnos con el objetivo de recaudar fondos para adquirir nuevo material para el centro. La escuela de circo lleva tres años abierta y este será su 2º curso, con el que espera repetir el éxito del año pasado en su sede de Sant Joan. lLaura Tur