JUAN MESTRE
El Consell de Govern tiene previsto aprobar mañana el proyecto de ley de medidas urgentes destinadas a la obtención de suelo para viviendas de protección pública, que plantea como tercera opción la posibilidad de utilizar suelo rústico para construir VPO. El texto, en su artículo tercero, señala que se crearán Reservas Estratégicas de Suelo en suelo urbano sin urbanización consolidada, suelo urbanizable o apto para urbanizar y suelo rústico de transición, por este orden. Es decir, la utilización de suelo rústico para construir viviendas sociales será el último recurso y el Govern dará prioridad al suelo urbano y al urbanizable.
El propio president del Govern, Francesc Antich, declaró ayer a este diario que no hará falta recurrir a suelo rústico para construir viviendas sociales ya que se aumentará la edificabilidad en determinados núcleos urbanos. «Los suelos urbanos tendrán prioridad», aseguró el jefe del gabinete autonómico, que quiere aprovechar el último Consell de Govern para sacar adelante otro de los proyecto estrella de la legislatura.
5.000 viviendas sociales
La exposición de motivos destaca que el objetivo es impulsar 1.250 actuaciones anuales en materia de vivienda. Al finalizar la legislatura se habrán creado 5.000 VPO en Balears, según el documento al que ha tenido acceso este periódico.
La ley señala que la Conselleria de la Vivienda seleccionará los suelos más aptos desde el punto de vista urbanístico, los considerará Reserva Estratégica de Suelo e iniciará de inmediato la tramitación de una norma subsidaria y complementaria del planeamiento. Las actuaciones de Reservas Estratégicas de Suelo tendrán la consideración de «actuaciones de interés general» ya que se trata de actuaciones urgentes y necesarias para hacer frente a la falta de suelo para crear vivienda de protección pública.
El proyecto de ley que aprobará el Govern precisa que en el caso de Palma la densidad máxima de edificabilidad será de 225 habitantes por hectárea. En los municipios de Calvià, Ciutadella, Eivissa, Inca, Llucmajor, Manacor, Maó y Marratxí la densidad máxima será de 180 habitantes por hectárea. En los municipios del Grupo A, la densidad será de 150 habitantes.
El documento que ha sido elaborado por la Conselleria de l'Habitatge señala que los límites globales de crecimiento no podrán superar los crecimientos previstos en las Directrices de Ordenación Territorial y los planes territoriales, con la excepción de Palma.
El artículo 5 de la ley de la vivienda plantea que los propietarios de los terrenos de cada una de las reservas estratégicas de suelo podrán destinar el 50 por ciento a viviendas sociales y la otra parte a pisos de precio libre. Una vez construidos las viviendas sociales, se adjudicarán según la legislación vigente. El objetivo es poder sacar al mercado pisos sociales que tengan un precio de 90.000 euros.