La ITB de Berlín cerró ayer sus puertas de forma oficial para el sector turístico balear con las mejores previsiones turísticas de los últimos años, puesto que el 60 por ciento de toda la programación turística de verano ya está vendida, circunstancia que es valorada positivamente por la Federación Hotelera de Mallorca, al ser la isla más beneficiada por este «boom» de reservas, aunque en opinión de su presidente, Antoni Horrach, «este boom está provocado porque han funcionado a la perfección los descuentos de venta anticipada de reservas (early booking), que llegan hasta el 15 por ciento del precio del paquete turístico».
Los hoteleros muestran su optimismo en cuanto a este hecho, «ya que nos da tranquilidad, al asegurarnos que las ventas van bien, pero también tiene una doble lectura, como es el hecho de que el alza de los costes va a incidir negativamente en la cuenta de resultados de las empresas. Como en todo balance, hay un activo y un pasivo, pero el resultado final será positivo», puntualizaba Horrach horas antes de su regreso a Palma con toda la delegación balear, entre ellos el presidente del Govern, Francesc Antich, el delegado de Gobierno, Ramón Socías, y el conseller de Turisme, Francesc Buils.
Ante esta coyuntura, la patronal hotelera pide a los grupos turísticos que faciliten información de forma periódica para evitar problemas de sobrecontratación y sobreocupación. Horrach apunta que salvo el grupo Alltours, «TUI, Thomas Cook y REWE no nos facilitan el estado real de ventas, lo que puede dificultar luego la comercialización de la temporada. Cuanta mayor información tengamos, antes podremos actuar para cortar ventas y evitar problemas». La estrategia que están adoptando los touroperadores alemanes también es seguida por los touroperadores británicos, «esto explica que el mercado europeo esté reaccionando bien a estos descuentos por venta anticipada, que está beneficiando a todas las zonas turísticas de la cuenca del Mediterráneo, pero especialmente a Mallorca. Lo que hay que evitar es que los descuentos se prodiguen más allá del 31 de marzo, que es la fecha estipulada para que acaben, dado que hay touroperadores que en abril están vendiendo siete noches en la Isla por el precio de cinco. Esta acumulación de reservas es el aspecto negativo, puesto que propicia que los cupos contratados no se hagan a precio de folleto, sino con ofertas».
Horrach añade que esta circunstancia es negativa por una cuestión puramente de costes, dado que si la temporada se contrató con alzas de precios de hasta un 3 y 3'5 por ciento, «estas ofertas minimizan las subidas, especialmente cuando el IPC está por encima del 4 por ciento, lo que hace que los ingresos bajen y los costes se disparen. Lo más positivo, pese a todo, es que la ocupación hotelera en 2008, en el caso de Mallorca, será igual a la de 2007, que fue muy buena».