Santa Eulària dará su primer paso en un ambicioso proyecto de puesta en valor y recuperación del entorno el río y de su patrimonio al crear un itinerario cultural que buscará mejorar la percepción de los ciudadanos hacia el único cauce de agua dulce de Balears.
Para ello, el Ayuntamiento cuenta con un equipo multidisciplinar agrupado por la consultora medioambiental, Duna Balears, y formado por la arqueóloga, Ana Mezquida, el historiador, Antoni Ferrer Abárzuza, el etnólogo, Antoni Tur Riera y el biólogo, Bartolomé Planas.
La ruta, que fue presentada ayer, es la primera actuación concreta de un proyecto a largo plazo que tiene como objetivo último «la recuperación de un caudal ecológico del río que pueda suponer la permanencia de los hábitats de agua dulce después de recuperarlas». Así lo explicó Bartolomé Planas para quien esta finalidad es «de momento es más un deseo que una realidad» aunque cuenta «con datos esperanzadores como la entrada en funcionamiento de la desaladora de Santa Eulària, que va a suponer la disminución de la explotación de los pozos de agua». Según Planas, para este deseo de futuro, un especialista en hidrogeología de Tarragona realizará un estudio de la situación hidrológica del río y sobre la posibilidad de su recuperación.
Para el diseño de la ruta, el equipo ha realizado un análisis preliminar de la situación del tramo bajo del río y de los aspectos medioambientales más significativos. En sus conclusiones, el estudio destaca que este tramo «está inmerso en un proceso de degradación y pérdida de biodiversidad», provocados también en los últimos años «por impactos negativos como los amarres no regulados». Según Planas, la urbanización en tierras agrícolas y el impacto turístico son los factores que más han contribuido al deterioro del río a lo largo de las últimas décadas, provocando la modificación del ecosistema natural y de la morfología submarina, que también serán objeto de estudio para su recuperación.
Mapa de ruta
Desde el punto de vista patrimonial, Abárzuza señaló que se buscará potenciar los diferentes elementos que rodean al río, como las acequias y los molinos, así como documentos históricos públicos y privados que permitirán recuperar la historia del río y por lo tanto del pueblo, «porque si Santa Eulària está donde está es porque estaba el río», apuntó.
Pero para todo esto primero vendrá la ruta cultural «como una alternativa para la defensa y enriquecimiento del valor territorial». Tendrá un presupuesto de 40.000 euros y recorrerá desde la desembocadura del río hasta el Puig de Missa haciendo hincapié en miradores, acequias, museos, molinos y puentes, a través de paneles informativos.
Para que este itinerario sea un realidad el próximo verano, se prevén distintas actuaciones como la limpieza del paseo y el entorno de la ribera del río hasta el Pont Vell, la limpieza de la vegetación y adecuación del sendero que va desde el Puente Nuevo hasta la escalera del Puig de Missa; la consolidación y restauración de los elementos patrimoniales integrados en la ruta; la señalización del itinerario; la difusión y divulgación del recorrido así como la creación de una página web. La ruta estará destinada a turistas, escolares y residentes, y también contará con mejoras de accesibilidad para personas con movilidad reducida.
Los puntos de interés avanzados ayer son los siguientes: 1. Inicio y final de ruta. 2. Panel sobre medio marino. 3. Desembocadura y panel de medio marino y natural. 4. Panel sobre el patrimonio. 5. Torrente des Ierns. 6. Vistas al Puig de Missa. 7. Molí de Baix. 8. Pont Vell. 9. Pont Nou. 10. Señalización del Puig de Missa. 11. Sèquia des Mallorquí. 12. Acceso a Puig de Missa. 13. Museu Barrau. 14. Mirador del Puig d'Missa e información sobre el sistema de molinos y canales del río. 15. Museo Etnográfico.