El presidente del Govern, Francesc Antich, así como el presidente de la Federación Hotelera de Mallorca, Antoni Horrach, y el propio alcalde de Calviá, Carlos Delgado, valoraron ayer de forma positiva la actitud mostrada por El Rey en las audiencias que tuvieron lugar en el Palacio de la Almudaina, «ya que nos ha mostrado su gran sensibilidad con las Islas y el apoyo que ha mostrado desde el primer momento a Balears, tras el atentado de ETA», señalaba Antich tras su audiencia con El Rey.
Antich resaltó que don Juan Carlos ha expresado «todo su apoyo a la actividad turística transmitiendo una sensación de seguridad en todo el archipiélago, por lo que confía que pese al atentado de ETA, Balears continúe siendo un destino turístico que reciba millones de visitantes al año, tal como ha sido hasta ahora».
El president aprovechó el encuentro para agradecerle al Rey la sensibilidad que la Familia Real ha tenido hacia Balears tras el atentado de Palmanova. «Sus primeras palabras nada más bajarse del avión fueron muy contundentes, al asegurar que a los terroristas de ETA seguiremos dándoles en la cabeza y hay que combatirlos hasta acabar con ellos, al mismo tiempo que manifestó sentirse segurísimo y encantado de llegar a Mallorca y a las Islas», puntualizó.
Calificó la reunión de cordial, afirmando que «El Rey se encuentra en buena forma y ha mostrado una tran sensibilidad, como siempre, por las Islas». Informó a don Juan Carlos de la situación de los mercados emisores y de los contactos mantenidos con las Oficinas Españolas de Turismo (OET) de Berlín y Londres, para así comunicar al Monarca que la actividad turística «está en una situación de normalidad».
Sector hotelero
Tras la audiencia con el alcalde de Calviá, el Monarca recibió a una representación del sector hotelero encabezada por el presidente de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM), Antoni Horrach, que estuvo acompañado por Gabriel Escarrer, Carmen Riu, Simón Pedro Barceló y Ferran Porto. Horrach valoró «fantásticamente esta reunión» y agradeció que fuera el mismo Monarca quien la hubiese pedido, con el fin de conocer la situación del sector hotelero.
El presidente de la FEHM resaltó la importancia de que la Familia Real no haya cambiado las fechas de su estancia en Palma, después del atentado, ya que «este gesto ayuda a mandar un mensaje de tranquilidad. El Rey se ha mostrado sensible a la situación de dificultad que estamos viviendo los hoteleros de Balears, a causa de la caída en el número de turistas alemanes y británicos, como consecuencia de la crisis económica, y de los últimos hechos acontecidos hace una semana, que nos han conmocionado a todos».