Los propietarios de los terrenos del sector UA-12, ubicados en ses Feixes d'es Prat de Vila, señalaron ayer que la construcción de un parque de 120.000 metros cuadrados en este entorno supondría a las arcas del Ayuntamiento de Eivissa una inversión de 40 millones de euros.
A esta cuantía se le sumaría el valor de las expropiaciones de estas fincas y el mantenimiento de una infraestructura que equivaldría a doce campos de fútbol, según concretó uno de los portavoces de los propietarios, Javier Luquin, para quien la materialización de una iniciativa de esta índole «es una quimera para un Consistorio arruinado y con problemas para pagar las nominas cada mes».
Luquin vaticinó que la intención de crear un parque es «una locura que se traducirá obligatoriamente en una importante subida de impuestos y tasas municipales, ya que las supuestas ayudas estatales a las que hacen referencia no llegarán cuando se vea que este espacio carece de interés medioambiental».
Javier Luquin recordó que «aunque cumplan su palabra y nos devuelvan ahora los más de 600.000 euros que abonamos hace años en concepto de aprovechamiento de nuestros terrenos, están obligados a compensarnos si pretenden expropiarnos nuestras parcelas, y eso es algo a lo que no vamos a renunciar». «Llevamos años pagando impuestos por suelo urbano, cedimos una parcela que han hormigonado, y han incurrido en una serie de arbitrariedades legales a las que no vamos a hacer la vista gorda», avanzó Luquin.
Los propietarios de los terrenos lamentan la indefensión de los ciudadanos ante «un ejecutivo para el que todo vale, que miente al afirmar que no hemos urbanizado antes porque no hemos querido».
Reclamaciones de responsabilidad patrimonial por valor de 55 millones de euros
Luquin recordó que el Ministerio de Medio Ambiente ha recibido una carta «en la que informamos a la ministra de que en nuestros terrenos no hay restos etnológicos importantes, sólo escombros y basura, y que nada queda de aquellas Feixes idílicas que se empecinan en recordarnos como algo reciente y fácil de reproducir, cuando la realidad es que su reproducción es inviable», resumió.
Los propietarios de la UA-12 han presentado reclamaciones de responsabilidad patrimonial por valor de unos 55 millones de euros contra el Govern balear y el Ayuntamiento de Vila por la pérdida de sus derechos edificatorios. Parte de la indemnización se reclama al Ejecutivo autónomo por la suspensión del desarrollo urbanístico de ses Feixes previsto en la Ley 4/2008 de medidas urgentes sobre el territorio, pero la mayor cantidad de la indemnización se exige al Consistorio por cambiar la calificación de suelo urbano a la de rústico.