En el concierto que ofrecerán mañana a partir de las 22,00 horas en el parque Reina Sofía, el trío La Execpción repasará algunos de sus mejores temas de los tres discos que tienen el mercado: Cata Cheli (2003), Aguantando el tirón (2006) y La verdad más verdadera (2009).
Previamente al concierto, Juan Manuel Montilla 'Langui' impartirá un taller de concienciación social, 'A mí no me digas que no se puede', en el aula 3 del espacio cultural de Can Ventosa para jóvenes de entre 13 y 18 años. Allí, los jóvenes plantearán sus dudas, lo que les inquieta y compondrán versos que más tarde cantarán con El Langui, quien explica en esta entrevista en qué consisten estas sesiones y en qué punto profesional se encuentra La Execpción.
-¿Cómo surge la iniciativa de crear 'A mí no me digas que no se puede'?
-Hace casi dos años que los ayuntamientos y asociaciones a donde vamos a dar conciertos me propusieron la idea y creo que es muy importante llevar hacia adelante iniciativas de este tipo, sobre todo por el momento en que nos encontramos. La juventud tiene falta de valores, de interés, de esfuerzo y de ilusión. Y a veces basta que profesores, padres o madres te digan lo que está bien para que no prestes atención, pero si te lo dice un referente musical o deportivo la actitud ya es más receptiva. Además, el ponerme delante de los chicos y chicas e intercambiar experiencias y opiniones es algo que a mí también me ayuda mucho. En las sesiones trabajamos mi experiencia a nivel personal y profesional para que vean que yo soy igual que ellos. Ya en la parte final, les animo a coger un boli y un papel para que escriban lo que sienten, lo que les preocupa.
-¿Esa falta de ilusión es porque conseguir lo que quieran es fácil?
-Sí, estamos en una sociedad en la que tenemos variedad en la nevera, a la hora de vestir, de elegir música y con esto lo que se consigue es que los jóvenes no valoren todo lo que tienen, que no sepan lo que es el esfuerzo, la motivación y la ilusión. Lo que tampoco pretendo en los talleres es que me vean como profesor, quiero que me vean como un igual.
-Hay dos conceptos, discriminación y superación, que siempre tratan en sus conciertos y talleres.
-Sí. La discriminación porque sigue estando presente; no sólo se produce por un defecto físico o por el color de la piel también se da porque un chaval no lleve zapatillas de marca. La superación tiene que estar muy presente no sólo en personas de movilidad reducida sino en todo tipo de personas. Hay que superarse día a día: en intentar buscar trabajo, en ayudar al prójimo, en todo.
-En sus letras hay humor, ironía y realidad.
-Nuestros textos son muy reales, viscerales, contundentes. Tenemos temas que no dan lugar a la risa como cuando hablamos del respeto del barrio. Cuando tratamos los complejos de uno mismo ahí sí que le damos ese toque de ironía y humor que creemos que tenemos que reírnos de nosotros mismos para poder reírnos de otras cosas.
-Si La Execpción no existiera se hubieran dedicado a...
-A mí me hubiera gustado ser futbolista y al Gitano Antón le hubiera gustado estudiar para ser catedrático.
-¿Qué proyectos profesionales tienen en mente?
-De momento no podemos sacar nuevo disco porque tenemos una demanda abierta contra la discográfica Warner. Hemos sido el primer grupo español en plantarle cara a una discográfica multinacional tan importante por contratos abusivos y otros temas. Hemos tenido vistas previas y estamos a la espera de la salida del juicio. El tercer disco, La verdad más verdadera, fue gratis en internet como parte de la protesta y la puesta a punto de la demanda. En solitario tenemos varias cositas abiertas.
-¿Qué le diría a la gente para que asistiera al concierto de mañana?
-Que es gratis. Pocas veces se puede ver a La Execpción gratis.