El director de Cáritas de Eivissa, Joan Marí, cifró en casi 200 los 'sin techo' que viven en Eivissa, un centenar menos que en 2008, cuando la entidad aseguró que este colectivo sumaba unas 300 personas.
Según Marí, en la actualidad, «una parte importante son mujeres» y tienen edades comprendidas «entre 30 y 60 años». «Hay un 30% de extranjeros y otros que van y vienen, porque es gente que está de paso», agregó. Según detalló, son personas que viven en condiciones «precarias o que por temporadas, directamente, viven en la calle».
Marí hizo estas declaraciones, ayer, con motivo del Día de los 'sin techo' 2010. Una jornada que Cáritas de Eivissa conmemoró por la mañana en Vara de Rey, con una exposición y venta de los productos que estas personas elaboran en los talleres que ofrece la entidad en su Centro de Día, un espacio donde acuden a desayunar y a buscar refugio en horario diurno, y cuya demanda de usuarios se ha visto incrementada estos últimos meses por el final de la temporada turística. «Ha habido un aumento muy grande, de unas 35 personas diarias, ahora hay veces que vienen 80», destacó el director de Cáritas.
El manifiesto
La jornada de ayer contó también con la lectura de un manifiesto. Según destacó Marí durante su lectura, «por desgracia las personas sin casa no son noticia». «En pocos medios de prensa se recogen las agresiones y defunciones de las personas que viven en la calle. Es una realidad que no queremos ver porque nos duele como sociedad, porque nos pone enfrente de un espejo que nos retorna la imagen de un mundo injusto y egoísta», remarcó. El director de Cáritas indicó también que en España «son unas 30.000 personas las que no tienen un techo en el que acogerse y más de un millón de personas viven en infraviviendas sin servicios mínimos». «Por todo ello, Cáritas junto a otros instituciones intentamos poner voz a los que no tienen voz y cara a los invisibles, porque una persona sin casa no sólo refleja una falta de espacio físico sino emocional, afectivo, psíquico y social», afirmó.
Por ello, según Marí, «Cáritas plantea a la Unión Europea, de aquí a 2015, una serie de problemáticas que deben resolver nuestros gobernantes» entre las cuáles destaca «que nadie duerma en la calle por falta de servicios y que nadie abandone un centro de acogida sin alternativa de alojamiento». «Entre todos tenemos que hacer fuerza para conseguir estos mínimos morales y sociales exigibles para toda persona», concluyó.