La Conselleria de Salut dispone en Eivissa y Formentera de ocho inspectores que deberán vigilar el cumplimiento de la nueva ley anti-tabaco, que entró ayer en vigor y que prohibe, de forma generalizada, el consumo de cigarrillos y puros en espacios públicos. El veto en bares y restaurantes es el que más polémica ha levantado, pero también se impide fumar en los parques, los hoteles sólo podrán tener un 30% de sus habitaciones equipadas para fumadores y se crea la figura del 'club de fumadores', espacio público cerrado gestionado por una entidad sin ánimo de lucro y en que se permite fumar pero no la venta de alcohol o de otros 'productos consumibles'.
Eso sí, el Govern anunció ayer que estos 'vigilantes' no realizarán ninguna «campaña especial» y que limitiarán su supervisión a su actividad habitual. La Conselleria señaló que durante 2010 se habían presentado 101 denuncias y se realizaron 1.057 inspecciones. Estas actuaciones originaron 79 sanciones, ninguna en las Pitiüses.
El departamento del conseller Vicenç Thomàs emitió un comunicado en el que defendió este cambio legal por ser «un paso decisivo y una de las principales intervenciones en favor de la salud pública de los últimos años». Además, se destacó el «amplio apoyo de profesionales sanitarios y entidades científicas» al redactado, así como que hay leyes similares en Francia, Italia, Irlanda o Reino Unido, entre otros países.
Según los datos de la Encuesta de Salud de Balears de 2007, los últimos disponibles, un 30,3% de las personas mayores de 15 años fuman, un 27% diariamente y un 3,3% de manera ocasional. Por sexos, los hombres fuman más (33,7%) que las mujeres (20,3%).
Dejar de fumar
La Conselleria recordó ayer que realiza acciones preventivas del consumo de tabaquismo y otras drogodependencias en las escuelas, en colaboración con la Conselleria d´Educació i Cultura, como son los los programas 'El secreto de la buena vida', 'Buenos días, salud', 'Decide' o 'Entrar sin fumar' que, en el curso 2009/10, han llegado a 19.246 alumnos y 664 profesores de 143 centros.
Además, la red de centros de Atención Primaria de las Islas lideran una parte muy importante de los programas asistenciales de tabaquismo. Más de 93.000 personas en Balears han recibido algún tipo de intervención sobre tabaquismo desde el 30 de noviembre de 2008 hasta el 30 de noviembre de 2010. Por islas, en los dos últimos años han sido 11.300 las intervenciones mínimas (consejos para abandonar esta práctica), 160 actuaciones breves (incian la deshabituación) y 222 avanzadas (participan en algún tipo de programa continuado).
Regular la venta
Sólo los estancos podrán vender tabaco en mostrador. En el resto de puntos de venta (quioscos de prensa, locales específicos de venta de prensa con acceso directo a la calle, tiendas de estaciones de servicio, salas de fiesta, establecimientos de juego, hoteles, hostales, bares y restaurantes) se tendrá que hacer con máquinas expendedoras «situadas en un lugar que permita la vigilancia directa y permanente» del personal del local para evitar la venta a menores.
Multas de entre 30 y 600.000 euros para los infractores
La nueva ley establece sanciones de entre 30 y 600.000 euros para quienes no cumplan con la nueva normativa. Una modificación que incluye la ley respecto a la norma anterior es que los expedientes por infracción se seguirán ejecutando contra los propietarios de locales o instalaciones que permitan el consumo de tabaco, pero también contra los propios fumadores, que hasta ahora eludían toda responsabilidad. Será motivo de sanción también el no informar debidamente sobre la prohibición del consumo de tabaco en un lugar donde esté prohibido y habilitar espacios para fumadores allí donde no lo contempla la ley.