La depuradora de Cala Tarida sigue acumulando retrasos debido por culpa de Costas. La instalación, largamente reclamada por los vecinos de la zona, ya está construida desde 2009, pero no se puede poner en marcha hasta que no esté ejecutado el emisario que conducirá las aguas depuradas al mar. Y eso requiere un permiso de la Demarcación de Costas que todavía no se ha otorgado.
Desde la Conselleria balear de Medi Ambient aseguraron que hace tiempo que piden a Costas que agilice el trámite y también desde el Ayuntamiento de Sant Josep confiesan que intentan «presionar» al organismo estatal para que emita un informe favorable, necesario para que el Consistorio pueda otorgar licencia de construcción de esta tubería.
Cala Corral
Según explicó el concejal de Medio Ambiente y Urbanismo de Sant Josep, Josep Antoni Prats, «Costas dijo que emitiría informe favorable condicionado a que los concesionarios del puerto de Cala Corral también den su consentimiento». Según explicó el regidor, los concesionarios de este puerto tienen que dar su permiso porque son los que explotan económicamente la zona y el emisario precisamente debe pasar por sus instalaciones para llegar al mar. «Nosotros desde Sant Josep no somos el actor principal, sólo podemos intentar presionar para que se agilice», indicó Prats, que reconoció que la cuestión se está retrasando mucho.
Desde la Conselleria balear de Medi Ambient recordaron que la obra civil de la depuradora ya está hecha desde hace años, pero que no la pueden equipar con maquinaria porque ésta se podría deteriorar por falta de uso e incluso podría ser objeto de actos vandálicos o robos. Por ello deberán esperar a que esté construido el emisario, algo que se está convirtiendo en todo un rompecabezas.
La depuradora de Cala Tarida es una infraestructura muy reclamada tanto por el Consistorio como por los vecinos debido al deficiente saneamiento de la zona, que ha provocado problemas de olores y de suciedad en el agua en los meses de verano.
Problemas reiterados de insalubridad y malos olores en la zona de Cala Corral
Los responsables del puerto de Cala Corral se han quejado en repetidas ocasiones a los medios de comunicación de las condiciones de insalubridad que se repiten durante los meses de verano en la zona, ya que la depuradora de la urbanización siotuada en sus cercanías no da abasto y vierte aguas sucias al mar con cierta asiduidad.
En diversas ocasiones se han quejado de los «horribles olores» que se producían, lo que hacía enfermar a los propios empleados, un problema de salud más allá de la incomodidad que supone para propietarios e inquilinos de las viviendas cercanas.
De hecho, también los vecinos se han quejado a veces de olores nauseabundos y de manchas en el mar de la zona.