El Ayuntamiento de Vila inició ayer el trabajo previo para el derribo del edificio norte de Santa Margarita, el que se encuentra al lado de los juzgados de Eivissa.
A lo largo del día de ayer, los operarios cerraron todo el perímetro, e incluso modificaron la ubicación de la caseta de la ONCE existente, e iniciaron las tareas previas del derribo como son la retirada del cableado y de los escombros. Así, y según un comunicado del Consistorio, la primera fase de esta operación será manual y consistirá en el desmantelamiento de las instalaciones y la retirada de todo el material de madera tanto interior como exterior «para poder recuperar la mayor parte posible de los elementos constructivos para su reciclaje y recuperación». Una vez finalizada la primera fase manual, se procederá al derribo del inmueble con maquinaria pesada.
El consejo de administración de Itusa adjudicó a la empresa Ferrovial Agroman S.A. el derribo del edificio norte por un importe de 119.981 euros, según el comunicado del Ayuntamiento de Vila. Este edificio fue construido en 1954 y consta de dos fachadas exteriores y ocupa un solar de unos mil metros cuadrados.
Desde el Ayuntamiento de Vila recordaron que el derribo de Santa Margarita tiene como finalidad la «remodelación y modernización urbanística del centro de la ciudad», dentro del proyecto Eivissa Centre. Asimismo, apuntaron que desde el Consistorio se está trabajando «para llevar adelante el resto de infraestructuras incluidas dentro del proyecto: «Recordamos que, hasta ahora, se ha ejecutado la nueva escuela de sa Graduada, el aparcamiento soterrado y el edificio Es Pla de Vila». El proyecto Eivissa Centre también prevé la construcción de un aparcamiento soterrado en Isidor Macabich, el traslado de los juzgados al solar de la antigua Graduada, la construcción de la nueva Delegación del Gobierno en los terrenos donde actualmente se ubica el almacén de Vies Públiques y la construcción de un auditorio en el solar de la antigua Delegación del Gobierno.
La otra mitad, a la espera de trasladarse
El edificio de viviendas protegidas de Santa Margarita cuenta con otro bloque de viviendas, que se encuentran en la acera de enfrente y sobre la que el Ayuntamiento ayer no hizo referencia en su comunicado. En este inmueble aún existen propietarios residiendo en sus viviendas después de negarse a realizar la mudanza al nuevo edificio Es Pla de Vila hasta que no esté todo firmado. Y es que, en octubre, Itusa les propuso hacer el traslado sin escriturar pero los vecinos rechazaron la medida.