Los podencos sueltos continúan representando un peligro en Es Cubells, en especial, en lo referente al tráfico. Distintas quejas de particulares han puesto sobre aviso al Ayuntamiento de Sant Josep, el cual ya está trabajando en un plan para acabar con el problema. «Se está planteando una iniciativa con ayuda de la Asociación de Cazadores de Sant Josep, e incluso con personas del Govern balear para ver cómo se puede solucionar este tema», declaró Paquita Ribas, concejala de Gobernación de Sant Josep, quién añadió que de momento, estaban «valorando distintas posibilidades para resolver la cuestión».
Sin embargo, el principal problema al que se enfrenta la iniciativa es que Eivissa no dispone de una perrera con suficiente capacidad para abarcar a los animales. «Si hacemos una intervención, necesitamos un lugar donde poder depositar a los podencos después», explicó la concejala.
Bartolomeu Marí Ribas, Sendic, el antiguo propietario de los animales, los mantenía en una situación lamentable, desnutridos y sin los cuidados necesarios, y los dejaba circular sueltos por el vecindario, lo que suponía un peligro para el tráfico. Debido a distintas denuncias presentadas por los vecinos, Sendic, fue incapacitado para el cuidado de los animales y enviado a tratamiento psiquiátrico en 2009. A continuación, se intentó desalojar la zona de podencos. Sin embargo, los animales continúan circulando por las carreteras, representando una amenaza para los vecinos.
Falta de espacio en las perreras
Paquita Ribas, concejala de Gobernación de Sant Josep, lamentó no disponer de un lugar en el que poder depositar a los podencos. «El Ayuntamiento no dispone de perrera. La perrera de Vila, que sería la más adecuada, está sobre saturada de animales y no podrían recoger los podencos hasta invierno», declaró.