El presidente del Consell, Vicent Serra, anunció ayer que estudian denunciar a Fiscalía la gestión que hizo el gobierno progresista del consorcio sociosanitario porque «no cuadran las cuentas». La Tesorería General de la Seguridad Social dio un aviso de embargo hace unos meses a este organismo por impago de 1,8 millones de euros en cotizaciones, a lo que se suma una multa por no haber pagado 400.000 euros. El Consell ha encargado al departamento de Intervención que emita un informe para saber si esta cuestión se denuncia a Fiscalía o al Tribunal de Cuentas o si el descuadre «se puede arreglar».
Serra avanzó esta medida en una rueda de prensa en la que denunció que el equipo de gobierno de Tarrés «duplicó» el endeudamiento de la institución, pasando de 9,1 millones de deuda en 2007 (último año del PP) a 17,7 millones en 2010. Serra remarcó que la deuda de los progresistas no fue para invertir como la de los populares, sino «para pagar gasto corriente no presupuestado».
Desfase de Tesorería
Otro ejemplo de «mala gestión», según el presidente, es el desfase de Tesorería, que a finales de 2010 era de 750.000 euros y en junio de 2011 era de 8,5 millones. «En seis meses, con una importante caída de ingresos, se siguió gastando de forma indiscriminada reconociendo obligaciones sin poder pagarlas», añadió Serra, que criticó duramente a los progresistas, ya que les acusó de «despilfarrar» el dinero y de gastar fuera de presupuesto basándose en acuerdos verbales de hasta 600.000 euros, además de perder convenios. «Presupuestaron lo que no tenían y gastaron lo que no había», indicó Serra, que dijo que esto ha dejado a la institución en una «dramática situación», provocada por «una lamentable gestión, hecha con una «gran falta de rigurosidad e irresponsabilidad». Una de las cuestiones «más graves» es que los progresistas «faltaron a su palabra» y «jugaron sin escrúpulos con las expectativas de personas, clubes y asociaciones», algo que los populares creen «intolerable».
Serra destacó que se gastó «sin control» en partidas presupuestadas y que había 3,2 millones en facturas imprevistas en las cuentas. Asimismo, en los presupuestos figuraban como ingresos convenios «que ni siquiera habían iniciado el expediente administrativo» En el caso de los 'slow breaks', por ejemplo, se preveía un convenio de 3,3 millones a cuatro años entre Turespaña, Govern y Consell, pero en 2011 le tocaba poner al Consell 500.00 euros y solo reservó 100.000. «Esto incumple el convenio y existe el riesgo de que se pierda todo el dinero», advirtió Serra, que recordó también que se perdió un convenio de un millón para rehabilitar el edificio para emergencias en sa Coma. En gastos financieros de confirmings se gastaron 150.000 euros y otro ejemplo que puso es que la guardería de Can Nebot no está preparada para abrir pero «tiene las inscripciones pagadas por los padres».
Asimismo, Serra explicó que «nunca se ha fiscalizado el procedimiento legal para la contratación de servicios y proveedores» y citó el informe del Tribunal de Cuentas de 2008, en el que se dice que el 52% de las subvenciones se dieron «a dedo». En 2007, en un año en el que gobernó el PP este concepto fue del 21%.
Otro aviso de embargo por no presentar la liquidación de Fecoef y Spoctur
El presidente del Consell reveló ayer que sobre la institución pesa otro aviso de embargo por parte del Ministerio de Economía y Hacienda de 1,2 millones de euros mensuales en concepto de la participación del Consell en los tributos del Estado por no haber presentado en plazo la liquidación de las cuentas de las empresas públicas Fecoef y Spcotur. El Consell tiene de tiempo hasta el 30 de septiembre para remitir estas cuentas.
A esto hay que añadir que la máxima institución insular tiene que devolver 5 millones de euros correspondientes al avance de participación de tributos del Estado que se hizo por encima de la recaudación real.
900.000 en protocolo. Serra acusó a los progresistas de gastar «sin control» el dinero presupuestado. Por ejemplo, el gasto destinado a Protocolo «no se redujo pese a la crisis» y alcanzó los 900.000 euros en cuatro años. Solo en el primer semestre de 2011 ya gastaron 105.000 euros. En reuniones y convenciones presupuestaron 62.000 euros anuales pero en 2011 gastaron la partida en seis meses. El presidente también denunció el gasto de 116.000 euros en el Pla de Govern o en estudios sobre comunicación por 18.000 euros, algunos de ellos «en un cajón sin aplicar».
3,2 MILLONES fuera de presupuesto. El presidente denunció que tienen facturas por pagar fuera de presupuesto por valor de 3,2 millones. En este punto se incluyen los compromisos verbales adquiridos con clubes, asociaciones y otras entidades. Además, en las cuentas figuraban como ingresos cantidades procedentes de convenios que no se firmaron. Es el caso de los de la residencia de Can Blai (2,1 millones), de ayuda a discapacitados (1,5) o el de 'slow breaks', que preveía 3 millones, cuya aportación «no se ha materializado».
4 MILLONES Situación «dramática». El conseller d'Economia, Àlex Minchiotti, remarcó que la cantidad de dinero por convenios no firmados asciende a 4,2 millones de euros en el caso de bienestar social, algo que calificó de «dramático». Ahí se incluyen Can Blai y el convenio para discapacitados, además de otros más pequeños. «No hay ni crédito, ni dinero firmado, pero son cosas que el Consell financió por responsabilidad porque son organismos que tienen que seguir funcionando», añadió Minchiotti, que aseguró que se ha trabajado de «espaldas al procedimiento».