El Centro de Investigación Económica (CRE) de Sa Nostra y la UIB, tras diez años realizando informes de coyuntura y analizando los pormenores de la economía balear, han llevado a cabo un profundo análisis de lo que ha pasado en la última década, llegando a la conclusión que las vías adoptadas para mejorar los ratios de productividad económicos «estaban equivocadas, porque no hay que apostar por un cambio de modelo, sino por una transformación global que nos haga salir de la actual crisis, de la cual se puede salir, porque la sociedad es consciente de ello y hay capital y recursos para lograrlo», afirmó ayer el director del CRE, Antoni Riera, en el acto de presentación del«Informe económico y social de las Islas Baleares 2001-2010», junto al director general de Sa Nostra, Pau Dols, y el vicerector de Economía de la UIB, David Pons.
Esta equivocación en la búsqueda de soluciones durante los dos últimos lustros se ha traducido, según el director del CRE, en que «el bienestar, medido en términos de PIB per cápita, ha descendido un 14,6 % en la última década en Balears, a un ritmo del 1,6 % anual, por el mal funcionamiento del sistema y la fuerte caída de la productividad. Urge por ello una transformación para mejorar la competitividad y prosperidad de las Islas, así como cambiar de óptica de análisis y poder visualizar la senda de crecimiento para generar PIB y rentabilidad».
Balears ha sido la comunidad con el crecimiento más bajo del PIB per cápita con un 2,5 % en términos nominales y un descenso acumulado del 14,6 %, «lo que pone de manifiesto que el archipiélago se ha empobrecido respecto al resto de comunidades y ha pasado de la tercera a la séptima posición en bienestar social».
El informe del CRE incide en que la economía balear ha crecido a una media del 1,1 % en los últimos diez años, por debajo del 2,1 % de media nacional, lo que supone «que no aprovechó todo su potencial durante la época expansiva y está muy por debajo el potencial de su economía».
Riera añadió que Balears dispone de «potencial, capacidad y estructura para que vuelva a incrementarse el bienestar, aunque Balears al igual que sucederá en Europa, crecerá poco en la próxima década y se creará poco empleo».
No saldremos de la crisis los primeros
El director del Centre de Recerca Económica (CRE), Antoni Riera, ha manifestado que es «rotundamente falso que Baleares será la primera en salir de la crisis» teniendo en cuenta el comportamiento de la economía de las Islas en los últimos 10 años.
Aprovechar los recursos en todos los ámbitos
«Baleares no tiene un problema de capacidad económica, no se necesitan más infraestructuras, ni equipamientos, ni instalaciones. Lo necesario para propiciar el crecimiento es transformar la economía con un mejor aprovechamiento de los recursos en todos los ámbitos y que pase de acumular a aprovechar», apuntó Riera. La receta del CRE para el futuro es que hay que asegurar la competitividad desde el impulso de la productividad, aprovechar mejor las infraestructuras y apostar por la innovación.
El CRE apuesta por una transformación estructural
El director del CRE se pregunta «¿qué se debe hacer para transformar el sistema económico regional? No es desestacionalizar, no es flexibilizar, no es diversificar, no es especializar, no es mejorar la financiación autonómica, ni construir nuevas infraestructuras, no es promocionar el producto turístico, no es nada de todo eso, hay que hacer una transformación estructural». Además, apuntó «que no han mejorado los resultados académicos y el capital humano y Balears sigue a la cola de España».