La venta de inmuebles en Eivissa vive uno de sus peores momentos desde el inicio de la crisis. Tal y como afirman los empresarios del sector, «no levantamos cabeza desde hace cuatro o cinco años, y no parece que vaya a haber, por ahora, una mejoría».
Ramón Arnau, delegado del colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (APIS) en las Pitiüses, manifestó ayer que «no hemos notado ningún crecimiento respecto al año pasado, y si lo ha habido es del 4 por ciento o incluso menos. La venta está parada, consecuencia de que los bancos no dan ningún tipo de financiamiento».
Respecto a la previsión para un futuro próximo, Arnau consideró que «todo depende de los bancos; cuando ellos den tregua, luego vamos nosotros», y añadió que, a pesar de existir alguna demanda de compra, «al final nunca se realiza, porque la gente va al banco y se asusta. Yo pienso que estaremos parados al menos dos años más».
El delegado de APIS en las Pitiüses explicó que la compra que más se realiza hoy en día es por inversión. «Si la gente compra para invertir, entonces puede esperar a salir de la crisis, a ver si llegan momentos de más alegría en el sector y nos da más satisfacciones a todos».
Demasiada oferta
Roberto Zamatei, agente de la inmobiliaria Tur y Serra de Eivissa, apuntó que «no se trata de un problema de temporada, sino que nos encontramos en un período de estancamiento económico muy desfavorable». «Desde 2008 hasta ahora, podemos hablar mejor de una involución que de una evolución», detalló el agente inmobiliario. Acerca de los precios, éste indicó que «a pesar de que actualmente encontramos precios más favorables que años pasados, la demasiada oferta y el nulo financiamiento hace que la cosa no funcione».
Las viviendas de franja de precio baja son las que, según Zamatei, «necesitan más financiación, mientras que las de franja alta pueden tener a día de hoy más salida en cuanto los precios hayan disminuido». Asimismo, el agente comentó que ahora mismo «hay más ofertas de alquiler de viviendas y locales comerciales, ya que los tiempos de venta se han alargado mucho y se intenta, de esta manera, que las viviendas se paguen los gastos, la hipoteca, etc».