El presidente de la Asociación de Concesionarios de Zona Marítimo Terrestre, César Jerez, dijo ayer que el negocio de las hamacas en las playas de Eivissa ha aumentado este año «entre un 10 y un 15 por ciento», según la zona, de manera que con este incremento se rompe la racha de caídas constantes que se venía produciendo desde el año 2004.
«Esta temporada ha ido mejor que la anterior, ya que se ha crecido hasta un 15 por ciento en algunas zonas, pero todavía no llegamos a las cifras de hace cinco o seis años», manifestó Jerez.
César Jerez explicó que, pese al buen tiempo, en las playas de la zona este de la Isla, como s'Argamassa, Cala Llonga o es Figueral, ya se están retirando las hamacas porque, sencillamente, «ya no hay turistas».
Sin embargo, señaló el representante de los hamaqueros de la Isla, en Platja d'en Bossa o en las playas del oeste, entre las que destacó Cala Bassa, en el municipio de Sant Antoni, o Cala Jondal, en el de Sant Josep, las tumbonas aún siguen instaladas porque «todavía quedan suficientes turistas».
La crisis
A pesar de que el año pasado se batió el récord de turistas en Eivissa, la contratación de hamacas no aumentó durante ese ejercicio, algo que, a juicio de Jerez, podría achacarse a la crisis económica. Esto coincide con las estadísticas generales sobre gasto turístico del año pasado, que demostraron que, pese al aumento en el número de visitantes que llegaron a Eivissa y Formentera, el ingreso fue menor que en años precedentes. No ha ocurrido así este año, señaló el presidente de la Asociación de Concesionarios de Zona Marítimo Terrestre, debido tal vez a la gran afluencia de turistas de este temporada, que se espera que incluso llegue a superar el récord del año pasado.
En 2010 el aeropuerto de Eivissa también batió su propio récord de usuarios, de forma que se superaron los cinco millones de viajeros, una cifra que también este año podría quedarse atrás, según las estimaciones de los expertos.
El hecho de que en las playas del oeste de la Isla aún estén instaladas a mediados del mes de octubre es gracias «al buen tiempo que está haciendo este año, algo que juega a nuestro favor, ya que sin sol no hacemos nada», y que está animando la llegada de turistas, señaló Jerez.
El buen tiempo en el mes de octubre es fundamental, según los expertos, a la hora de conseguir alargar la temporada lo máximo posible.
«Nos ayudan los problemas en los países árabes»
A juicio del presidente de la Asociación de Concesionarios de Zona Marítimo Terrestre, las revueltas sociales que se han ido sucediendo este año en los países del Magreb y de Oriente Próximo están favoreciendo a las Pitiüses, que están recibiendo más visitantes gracias a las protestas en estos destinos turísticos. César Jerez señaló en concreto a Túnez y Egipto, dos destinos, el primero de sol y playa y el segundo eminentemente cultural, que son competidores directos de las Pitiüses. Desde que se produjeron las revueltas el turismo ha caído en picado en estos países, aunque en los últimos meses ha comenzado a notarse una recuperación.