El color rosa invadió ayer todo Eivissa con motivo de la celebración del Día Mundial contra el Cáncer. Por toda la Isla hubo lazos rosas, camisetas rosas, bolsas rosas, regalos rosas... y todo para llamar la atención sobre esta enfermedad que afecta a una de cada tres mujeres del servicio de Oncología del hospital Can Misses.
Los encargados de informar sobre ella fueron los miembros de la Asociación de Ibiza y Formentera contra el cáncer, de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) y del Àrea de Salud de Eivissa y Formentera.
Mesas informativas
Todos ellos lo hicieron a través de distintas mesas informativas situadas en los hospitales de Can Misses y Formentera, en los centros de salud, en el Paseo de la Fuentes de Sant Antoni y en el Paseo de Vara de Rey de Vila.
Precisamente en este último lugar los encargados de dar información eran las voluntarias Merry, Carmen y Pilar, junto a Francisco Naranjo, trabajador social de la Asociación Española contra el Cáncer.
En este sentido, según Naranjo, «en Eivissa cada vez hay más gente concienciada por este tema ya que, desgraciadamente, el cáncer de mama se está convirtiendo en una enfermedad muy común».
Por eso las distintas asociaciones destinan cada vez más proyectos y ayudas a los afectados, como por ejemplo, según este trabajador social «el proyecto Volver a hablar destinado a los afectados por una traqueotomía, el proyecto Cuídate con talleres de yoga o pintura para los enfermos y familiares, o las ayudas económicas para sufragar prótesis, pelucas o sillas de ruedas».
Por su parte, el Àrea de Salud de Eivissa y Formentera llevó a cabo distintos actos simbólicos para solidarizarse con el Día Mundial contra el cáncer de mama, como emitir todas las citaciones para consultas o interconsultas en papel rosa, símbolo de la lucha contra esta enfermedad.
Además, y en una campaña que llevaba por lema Deja tu huella en la lucha contra el cáncer de mama, en sus mesas informativas había un panel con un lazo blanco que los pacientes deberán convertir en rosa dejando sus huellas dactilares plasmadas en él, con el fin de que al final de la jornada ese lazo blanco fuera el lazo rosa que simboliza la lucha contra la enfermedad.