Las obras del primer cinturón de ronda cuestan casi 7 millones de euros y el Consell d'Eivissa solo dispondrá en 2012 de 3,8. Pese a ello, desde la institución intentarán sacar a concurso los trabajos y comenzarlos en octubre del año que viene. «Sabiendo que tenemos estos 3,8 millones vamos a ver si podemos pagar lo que nos falta en 2013», indicó la consellera de Mobilitat, Pepa Costa, que avanzó que el conseller d'Economia está estudiando la manera de solventar este contratiempo porque consideran que esta reforma, que comprende el tramo entre la rotonda de ses Figueretes y la de Can Misses, es «prioritaria».
El problema surgió cuando se dieron cuenta de que los 7 millones que debía pagar el Govern balear al Consell del convenio de carreteras correspondientes a 2010 y 2011 se habían trasladado al año 2018 y 2019. Al parecer, este aplazamiento fue algo que hizo el exconseller d'Obres Públiques Jaume Carbonero de forma unilateral y sin informar al Consell. Esta falta de pago ha provocado que peligren las obras del primer cinturón y de la carretera de ses Salines.
Ahora el Govern ha confirmado que en 2012 sí se pagarán los 3,8 millones correspondientes, pero no se recupera ese dinero que aplazó Carbonero y que corresponde a los años 2010 y 2011. Desde PSOE-Pacte, sin embargo, aseguran que no se puede romper este convenio de forma unilateral y que ese pago se tiene que hacer.
«Proyecto bueno»
La consellera explicó que el proyecto de reforma de la E-10 es «bueno», no lo cambiarán e incluso conservarán el carril bici.
Actualmente la tramitación administrativa de esta obra está muy avanzada, ya que próximamente se podrá hacer la aprobación definitiva del proyecto. «Esta semana nos ha llegado el informe de Recursos Hídrics y solo nos falta el de Aviación Civil», remarcó Costa, que indicó que luego habrá que hacer las expropiaciones. La previsión es que las obras pudieran empezar tras la temporada turística que viene, en octubre de 2012, si finalmente «los servicios económicos nos dejan tirar adelante». Las obras tienen un periodo de ejecución de un año.
Otro de los problemas con los que se encuentran es que con este dinero del convenio de carreteras procedente del Govern también se tenían que pagar dos milloens de peaje en sombra de la carretera de Sant Rafel a Santa Eulària que hizo el PP en su día.
Con este convenio además se tenía que pagar también la reforma del primer tramo de la carretera de ses Salines, que comprendía la adecuación del aparcamiento y añadir carriles bici que discurrían por encima de los estanques en la zona más cercana a las playas.
Costa cree que este proyecto no es tan prioritario como el del primer cinturón, pero tiene un coste mucho menor y quizás en algún momento se podrá ejecutar. Eso sí, considera que las obras ni siquiera podrán empezar en 2013 porque no habrá dinero. Eso sí, se continuará con la tramitación administrativa por si en algún momento hay disponibilidad económica.
«Se está redactando el proyecto, se hará el mismo que había encargado el anterior equipo de gobierno», remarcó Costa, que avanzó que están pendientes de lo que diga al respecto la Comissió balear de Medi Ambient para ver si se puede poner carril bici.
«No creo que podamos recuperar el dinero del convenio»
Costa es pesimista y no cree que se puedan recuperar los 7,7 millones del convenio con el Govern que el exconselelr socialista Jaume Carbonero aplazó.«Ellos ponían este dinero para 2018 y 2019, pero imagínate todo lo que puede pasar hasta entonces. Nosotros lo necesitábamos ahora y no lo tenemos», añadió Costa, que recordó que la cuantía total de este convenio con el Govern era de 23,5 millones.
En cuanto al del Estado, que asciende a 55 millones, no ha habido ningún problema de pago, ya a finales de noviembre se recibirán los 14 millones de 2011 y en 2012 se recibirán 7,5. En este caso las obras previstas son las de las vías de Sant Miquel, Sant Joan y triángulo de Jesús.