La portavoz del grupo parlamentario socialista, Francina Armengol, ha acusado hoy a los gobiernos central y autonómico del PP de estar abocando España y Baleares «a una recesión mucho más profunda» con subidas de impuestos y medidas como los Presupuestos Generales presentados el pasado viernes.
En una rueda de prensa, Armengol ha acusado hoy al de PP haber cometido «un fraude electoral» tanto en las islas como en el conjunto del país porque se presentó a las elecciones «para hacer unas cosas y luego hace otras».
Según Armengol, tanto en los 100 días de gobierno que lleva el PP nacional, como en los 300 días del Govern balear, «han batido todos los récords posibles en la Democracia» en el incumplimiento de compromisos electorales, por lo que la población de siente «claramente estafada».
Armengol ha criticado tanto los presupuestos generales presentados por el Gobierno central como la subida de impuestos del Govern balear, aprobadas ambas el pasado viernes y ha recordado que tanto el líder del PP nacional, Mariano Rajoy, como el balear, José Ramón Bauzá, prometieron que reactivarían la economía, bajarían el paro y «nunca subirían impuestos».
«Lo del viernes son más despidos, más recortes y más impuestos», ha dicho Armengol, que ha acusado al PP de aplicar una política que está «ahogando a la ciudadanía» con recortes e impuestos que «están abocando España y Baleares a una recesión mucho más profunda».
La socialista ha defendido la proposición no de ley que plantea mañana su grupo en el Parlament, para promover la subida del impuesto de patrimonio a las rentas altas, en vez de «que se suban impuestos a las clases medias» con medidas como el céntimo sanitario acordado el viernes por el Govern.
Armengol ha acusado al Govern de «sumisión» a los dictados del Gobierno central y ha afirmado que «Bauzá no pinta nada en Madrid», ni lucha «absolutamente nada» ante el Gobierno.
Según la líder socialista, si Bauzá hubiera negociado recibir del Gobierno central las inversiones estatutarias de 2011, hubieran supuesto 400 millones de euros para las islas, más de los 350 que ahora tiene que recortar para cumplir el objetivo de déficit para 2012.
En opinión de Armengol, los dos gobiernos del PP demuestran su ineficiencia e incapacidad y «solo miran por unos cuantos», con medidas como la «amnistía a los defraudadores y tramposos».
El portavoz adjunto, Vicenç Thomàs, ha abundado en que la amnistía fiscal aprobada para el Gobierno central solo beneficiará a los defraudadores, a quienes concede el anonimato con la promesa de no aplicar el Código Penal si blanquean dinero, lo que considera «un mal ejemplo para los ciudadanos honrados».
Ha puesto como ejemplo de esta medida que un ciudadano que gane 100.000 euros anuales con un salario honrado, paga 35.000 euros de IRPF y quien lo haya defraudado bastará que pague 10.000 y mirarán para otro lado.
Thomàs ha cuestionado la capacidad ética que tendrán en adelante los inspectores de Hacienda para revisar las declaraciones de los contribuyentes.
Otras medidas criticadas por el diputado socialistas han sido la desaparición de los fondos para políticas activas de ocupación, la introducción del copago en la justicia y las subidas del coste de la luz y el gas.