Esta semana, en respuesta a una pregunta de la diputada Sofía Hernanz (PSOE), el secretario de Estado de Justicia, Fernando Román (PP), confirmó que la ubicación que el Ministerio tiene prevista para los nuevos juzgados de Eivissa es la antigua escuela de sa Graduada, lo cual se contradice claramente con los comentarios que se escuchaban en los últimas semanas acerca de que la sede definitiva de los juzgados sería el edificio Cetis. En realidad, la respuesta del Gobierno no supone ninguna sorpresa, pues ya a finales del año 2007 el Ministerio de Justicia, entonces en manos del gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, advirtió de que el Cetis no debería convertirse en sede judicial porque no ofrece «las mínimas garantías de seguridad».
«La ubicación de la sede judicial en el edificio centro intermodal y de seguridad [el denominado Cetis del barrio de sa Colomina] no reúne las adecuadas y mínimas garantías de seguridad». Así de claro se indicaba en la carta que la entonces subdirectora general de obras y patrimonio del Ministerio de Justicia, Marta García, dirigió a la alcaldesa de Vila en aquel momento, Lurdes Costa. Semanas después, a principios de 2008, desde el Ministerio de Justicia se señaló que el Cetis no se consideraba «adecuado» desde el punto de vista de la seguridad «en relación con la incompatibilidad de uso entre una estación de autobuses y un edificio judicial».
Pese a este informe del Ministerio de Justicia, a lo largo de estos últimos años se han ido instalando poco a poco diversos servicios judiciales en el Cetis. Allí están en la actualidad los Juzgados de Primera Instancia, el Registro Civil y, desde hace unos días, la Fiscalía. Además, en el caso de que, tal y como se lleva solicitando desde hace años, finalmente se crea un nuevo Juzgado de Primera Instancia, también se instalaría en el Cetis. Todos estos traslados han aliviado considerablemente la saturación que se padece en el edificio judicial de la avenida Isidor Macabich, un inmueble ya muy viejo que presenta carencias muy graves.
Durante su intervención en la comisión de esta semana, Sofía Hernanz recordó que la situación de los juzgados de Eivissa es «lamentable», hasta el punto de poder ser considerados «uno de los peores, sino el peor, edificio judicial español» y cuya solución solo se empezó a ver la luz para la construcción de una nueva infraestructura cuando en 2004, en el marco del proyecto Eivissa Centre, el Ayuntamiento ofreció la antigua escuela de sa Graduada para levantar en su lugar un edificio moderno y correctamente equipado.