El presidente de Autoritat Portuària de Balears, José María Urrutia, apuntó ayer que las obras de la remodelación de la fachada marina «posiblemente estén contratadas a finales de año, pero son fechas que no son fijas». Y es que, Urrutia apuntó que Autoritat Portuària «empezará las obras a partir de que el Ayuntamiento de Eivissa nos comunique cuál es la solución deseada [para ubicar el tráfico entre las Pitiüses] y a partir de ahí se intentará adecuar la solución definitiva a todas las sugerencias y demandas que nos transmitan; la fachada marítima está condicidona a la respuesta del Ayuntamiento».
Una vez que se haya optado por una de las tres propuestas planteadas para ubicar el tráfico con Formentera, Autoritat Portuària deberá redactar el proyecto definitivo para, posteriormente, licitar y comenzar las obras: «Pero eso requiere unos plazos y unos tiempos», apuntó Urrutia que ayer viajó a Eivissa para presidir el Consell de Navegació i Port del puerto de Eivissa.
El Ayuntamiento
En cuanto a la ronda de contactos que mantiene el Ayuntamiento de Eivissa con diferentes colectivos, la alcaldesa Marienna Sánchez-Jáuregui apuntó ayer que el próximo día 24 habrá una nueva reunión con los vecinos de Vila. «No sé si se sabrá la opción definitiva pero esta reunión será un termómetro muy importante para saber qué quieren los ciudadanos de Eivissa», apuntó.
En esta línea, la alcaldesa indicó que desde el Consistorio no se ha fijado ninguna fecha límite «porque aún estamos haciendo consultas y será después cuando se hagan las sugerencias». Así señaló que durante el mes de julio se realizarán todas la reuniones para trasladarlas a Autoritat Portuària. Asimismo, Jáuregui señaló que la opción que se elija será «buena para la mayoría porque ya sabemos que ninguna de ellas será buena para todos».
Para Urrutia cualquiera de las tres opciones «es buena pero todas tienen inconvenientes y ventajas; lo que es indudable es que el tráfico de Formentera, sea de buques mixtos o de pasajeros, tiene que operar desde un solo punto, a nosotros, sinceramente, nos da igual».