Tanto el PSOE como el grupo ecologista GEN arremetieron ayer contra la nueva desprotección que plantea una enmienda que ha presentado el PP a la nueva ley de Costas y que reduce la zona de litoral protegido de 100 a 20 metros en el caso de terrenos que ya estuvieran consolidados o tuvieran todos los servicios antes de 1988. Según esta enmienda, serán clasificados como suelo urbano aquellos núcleos que en el año 88 tuvieran alguno de los siguientes requisitos: que contaran con acceso rodado, abastecimiento de agua, evacuación de aguas residuales y suministro de energía eléctrica o que estuvieran consolidados por la edificación de al menos un tercio de su superficie.
La dirigente del grupo ecologista GEN Neus Prats se mostró ayer muy enfadada e indicó que ya que el PP de Eivissa está tan concienciado con el tema de las prospecciones petrolíferas e incluso ha hecho un logotipo contra ellas, debería hacer otro para protestar contra la nueva ley de Costas porque sus consecuencias pueden ser «nefastas». «¿O será que no lo hacen porque están de acuerdo y en el caso de las prospecciones petrolíferas no porque no pueden pispar ni un duro ni ellos ni los suyos?», se preguntó Prats, que indicó que esto en la práctica supondrá que «la primera línea de litoral se llene de nuevas urbanizaciones», porque hay planes urbanísticos en Eivissa que no se han podido aprobar porque lo impedía la Ley de Costas.
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