La alcaldesa de Eivissa, Marienna Sánchez-Jáuregui, indicó ayer que cerrará la discoteca Bomba (promovida por el empresario italiano Giuseppe Cipriani en el paseo marítimo) si sus promotores deciden abrirla sin licencia. «Nunca se podrá permitir la apertura si no tiene permiso, el Ayuntamiento procedería inmediatamente al cierre, aunque entiendo que no se atreverían a abrir sin licencia», indicó la primera edil cuando fue preguntada por las intenciones de los promotores de la sala de fiestas de abrir el próximo 22 de mayo.
Según explicó Jáuregui, es cierto que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Vila impide la apertura de nuevas discostecas, pero en este caso lo que hay que estudiar es si la licencia que existía en su día todavía está vigente o no. «Los servicios técnicos lo están analizando, hay una serie de trámites técnicos y jurídicos», explicó la primera edil, que indicó que se necesitan informes urbanísticos, del ingeniero industrial y un trámite de información pública. «Según lo que resulte de los informes se podrá autorizar o no, pero aún se están haciendo trámites y aún no hay nada que afirme que esta autorización se pueda dar», añadió la alcaldesa.