El Hospital de Can Misses de Eivissa ha llevado a cabo la primera cirugía transoral en un caso de cáncer de laringe, una intervención en la que se han utilizado bisturíes de tungsteno y material quirúrgico específico adquirido recientemente por el Área de Salud, informa el Govern.
Se prevé hacer entre quince y veinte operaciones de este tipo al año, lo que evitará entre cien y ciento veinte traslados al hospital de referencia.
El servicio, dirigido por el doctor Lluís Conill, ha contado con la colaboración del profesor Jorge Basterra, experto en oncología laríngea, jefe de Otorrinolaringología del Hospital General Universitario de Valencia y catedrático de la Universidad de Valencia.
La intervención ha consistido en una resección amplia del hemilaringe izquierda y de la derecha. En condiciones normales, esta cirugía habría requerido una técnica abierta muy agresiva o remitir el caso a Palma para intervenir con cirugía láser.
Según el doctor Conill, «la previsión es hacer entre quince y veinte intervenciones de este tipo al año, lo que supone un salto de calidad, ya que la mayoría de los traslados en Palma son para intervenir con cirugía láser».
«Se evitarán entre cien y ciento veinte traslados si se tiene en cuenta que cada paciente debe desplazarse para la intervención y para las revisiones pertinentes tres o cuatro veces, además de la hospitalización postoperatoria, que llega a dos semanas», añade.
La cirugía transoral es mínimamente invasiva para tratar el cáncer de laringe y de orofaringe y tiene tasas de curación similares a las de la abierta y la radioterapia en determinados casos, mientras que ofrece una mejor preservación de los órganos y menos secuelas adversas en los casos de cáncer de laringe o de orofaringe en una etapa incipiente o intermedia que son susceptibles de resección.
Debido a que la laringe es esencial para el habla, la deglución y la respiración, la eficacia y la agresividad de la terapia pueden afectar la calidad de vida a largo plazo y las opciones de terapia futuras.
En los casos de pacientes con esta enfermedad en una etapa incipiente, la cirugía transoral puede proporcionar un tratamiento curativo y la preservación de los órganos.
En la cirugía abierta tradicional, la intervención quirúrgica es más agresiva, no sólo para la laringe sino también para los tejidos circundantes, como el cartílago, que luego se han de reconstruir.
La cirugía abierta está asociada a dolor, pérdida del funcionamiento normal y un largo tiempo de recuperación.
El potencial que tiene para perjudicar el habla, la respiración y la deglución es una preocupación importante en los pacientes con una función pulmonar deficiente.
En contraste con la cirugía abierta, con la cirugía transoral el cirujano accede al tumor con la ayuda de un endoscopio a través de la boca aprovechándola como orificio natural, con lo cual se provoca el menor daño colateral posible .
El método transoral permite al cirujano tener acceso directo y vistas de alta resolución ampliadas de los tumores laríngeos sin tener que hacer incisiones externas.
Una vez que el paciente recibe anestesia general y es intubado, le colocan un endoscopio por la boca y la faringe y se centra sobre el tumor.
El objetivo de la cirugía transoral es resecar los tumores laríngeos y orofaríngeos provocando un daño mínimo a los tejidos normales y preservando al máximo la función de los órganos.
De esta manera, el tumor se extirpa con el margen quirúrgico más estrecho posible.
La paciente que fue intervenida en Can Misses, diagnosticada por el doctor Isidro Alonso, se encuentra bien y pronto comenzará la rehabilitación fonatoria con la logopeda del Área de Salud, María José Vidal.
Además de los doctores Conill y Alonso, el Servicio de Otorrinolaringología está compuesto por la doctora Noemí Conejo y los doctores Juan Marino y Antonio Tugores.