Siete farmacias de Baleares realizarán test rápidos del Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) gracias al convenio de colaboración que han presentado hoy la Conselleria de Salud y el Colegio de Farmacéuticos de las Islas.
Las oficinas de farmacia que participan en el convenio son, en Mallorca: Caldentey-Vicens, Frau-Frau y March-March en Palma, Dupuy-Gisbert en Inca y Sureda-Pedrals en Manacor. En Menorca ofrecerá el servicio la farmacia Seguí Puntas de Maó y en Eivissa se encargará la farmacia de Josefa Torres Torres.
La persona que acuda a alguna de estas farmacias a realizarse el test solo tendrá que firmar el consentimiento informado y aportar cinco euros. El coste restante lo abonará la Dirección General de Salud Pública y Consumo.
El convenio se ejecutará durante este año y las farmacias que ofrecerán el servicio estarán identificadas con un distintivo que indique: «En esta farmacia se hace el test rápido de VIH/SIDA de manera anónima», informa en un comunicado la Conselleria de Salud.
Los test rápidos de detección del VIH en las farmacias se enmarcan dentro de las prioridades que tiene la Coordinación Autonómica de Drogas y de la Estrategia del Sida de facilitar el acceso a la prueba de forma anónima a la población con conductas de riesgo, no incluido en otros programas de detección del VIH.
Las personas que pueden tener el virus y deben realizarse el test son aquellas mayores de 16 años que hayan tenido alguna de las prácticas de riesgo del VIH, como relaciones sexuales con penetración sin preservativo y el uso compartido de material para inyectarse drogas.
El test rápido del VIH se realiza mediante la extracción de unas gotas de sangre con un pequeño pinchazo en el dedo. Estas gotas se depositan sobre una tira reactiva y el resultado se obtiene en unos 20 minutos.
La fiabilidad de la prueba es del 100 % siempre que hayan transcurrido al menos tres meses desde la última práctica de riesgo. Si el resultado es positivo, se debe confirmar con la prueba convencional en un centro de salud.
Con esta medida se intenta conseguir una detección de la infección de la manera más precoz posible, informa la Conselleria de Salud. Además, asegura que el 55 % de los diagnósticos nuevos de infección por VIH son tardíos, es decir, que las personas diagnosticadas son susceptibles de tratamiento o ya han desarrollado el sida.
Asimismo, la Conselleria de Salud recuerda que el coste del tratamiento es menor si la infección se diagnostica en los estadios más tempranos de la enfermedad.