El buque cablero Certamen permaneció ayer durante todo el día en la bahía de Cala Jondal con el fin de solucionar la avería de la conexión de fibra óptica que une Eivissa con Formentera y que una embarcación de gran eslora rompió el pasado martes.
El Certamen fondeó en Cala Jondal a la altura de la rotura del cable después de que llegar al puerto de Vila en la noche del sábado. La embarcación, con bandera italiana, tiene 20 metros de manga y otros 84 de eslora.
La rotura del cable de fibra óptica, que obligó a Formentera a volver a utilizar los sistemas de radio enlace para tener conexión a internet así como servicio de voz y datos en la telefonía móvil y fija, se encuentra en el mismo punto exacto que la anterior avería, que se produjo hace solo un mes y medio. Así, el cable volvió a ser dañado a 1.400 metros de la costa de Cala Jondal, zona donde es frecuente el fondeo de embarcaciones a lo largo de todo el verano. Desde Telefónica, indicaron que la profundidad a la que se debe encontrar el cable a esa distancia no debe superar los 150 metros de profundidad, debido a la proximidad con la costa.