La empresa IB-RED ha denunciado ante la Secretaría de Estado y ante la Guardia Civil y el Juzgado de Eivissa las acciones de sabotaje con emisiones piratas que, han asegurado, están impidiendo la puesta en marcha de la red 4G en las Pitiüses. Esta empresa ha recordado que es la titular de la red tras la cesión aprobada por la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información.
Desde la compañía han afirmado que «nuestros técnicos e ingenieros han detectado interferencias dañinas, justamente en los días posteriores al anuncio de la implantación de la red en Eivissa».
Así, han manifestado que, según demuestra un informe pericial, los canales asignados para el 4G a IB-RED han sido interferidos, impidiéndose el funcionamiento de la red de banda ultrarrápida, que se convertiría en la primera de este tipo en el medio rural de España y en la segunda de Europa.
Los hechos han sido puestos en conocimiento de las autoridades pertinentes, que han abierto una investigación. La empresa ha explicado que «estamos desplegando la red 4G en Eivissa y teníamos previsto ponerla en pleno funcionamiento la primera semana de octubre». Ahora, se han visto obligados a posponer la presentación a la espera de que dar con los causantes del sabotaje.
Desde IB-RED han confiado en que pronto se descubrirá a los autores del delito, tras los trabajos de localización que se están realizando mediante un scanner directivo de los lugares desde los que se están produciendo los sabotajes.
El director de la empresa, Alberto Navarro-Rubio, ha resaltado la inconsciencia de los autores, ya que, por un lado, es fácil localizar los puntos y, por otra parte, el hecho de sabotear una red de estas características supone un delito penal castigado con penas que van desde los seis meses a los tres años de cárcel».
Se da la circunstancia de que IB-RED ya denunció en mayo ante la Jefatura Provincial de la Secretaría de Estado la existencia de repetidores ilegales en Eivissa de la operadora EURONA TELECOM, que no cuenta ni con la titularidad de la frecuencia, ni con los permisos oportunos del Ministerio para la puesta en marcha del repetidor. En fechas posteriores se formuló otra denuncia acompañada por actas notariales y peritajes del mismo hecho.
Estas estaciones siguen enviando otra certificación sin haber sido retiradas y continúan emitiendo.