La crisis ha dejado huella en el tejido comercial pitiuso. Así al menos lo demuestran los datos del anuario económico de La Caixa, donde se refleja que en el 2007 Eivissa y Formentera contaban con un total de 3.938 actividades comerciales minoristas, cifra que en 2012 pasó a 2.791, lo que representa una caída del 29% y en números absolutos significa que en seis años han cerrado 1.147 establecimientos comerciales. Con el inicio de la crisis en 2008, cuando se contabilizaron un total de 3.926 actividades comerciales minoristas, la cifra no paró de disminuir hasta los 2.791 del año pasado, la más baja de estos cinco años.
Por municipios, el que más ha perdido en este periodo es Vila, que pasó de los 1.738 a los 1.340 del año pasado (395 menos), seguido de Santa Eulària con 337 menos en cinco años (de los 1.004 de 2007 a los 667 contabilizados el año pasado), Sant Antoni con 211 establecimientos menos (de 584 a 373) y Sant Josep, que pasó de los 336 del 2007 a los 261 del año pasado, lo que supone que han desaparecido 75 establecimientos. Formentera, por su parte, ha visto cómo han desaparecido 126 actividades comerciales minoristas, pues pasó de los 276 de hace cino años a los 150 establecimientos del 2012.