El Ayuntamiento de Eivissa abrió ayer un periodo de consultas en el que durante un mes vecinos, comerciantes, colegios profesionales y agentes sociales podrán presentar sus propuestas de renovación y revisión del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) de los barrios de la Marina, sa Penya y Vara de Rey. Así, el Consistorio inicia hoy un calendario de reuniones que se desarrollará durante un mes con diferentes asociaciones vecinales, de comerciantes, partidos políticos y agentes sociales. Además, en el tablón de anuncios de la página web municipal (www.eivissa.es) se pueden enviar las propuestas a través del link ‘Consulta Pepri' (allí se puede ver también el Pepri actual). Una vez recibidas las propuestas, el Ayuntamiento maneja un plazo de entre ocho y nueve meses para tener redactado el nuevo documento, pero tardará más en entrar en vigor
La meta
La alcaldesa de Eivissa, Pilar Marí, destacó ayer que el objetivo del Consistorio se centra en impulsar que la gente vuelva a vivir en estos barrios y conjugar este uso residencial con el comercial: «Queremos impulsar la recuperación de estos barrios emblemáticos no sólo con inversiones públicas sino fomentando las privadas. Si hay equipamientos sociales y viviendas se atraerá la inversión privada», destacó Marí, quien recordó que el Pepri actual lleva vigente desde 1994. Por este motivo, el concejal de Urbanismo, Alejandro Marí, recalcó la importancia de actualizarlo y establecer «qué usos queremos darles a estos barrios».
El arquitecto municipal y director de la ponencia técnica del Pepri, Carlos Sáez, destacó ayer que la revisión está en fase inicial, pero que se cambiará «el sistema de regulación de los usos acogiéndose al plan general, pero habrá que hacer retoques según las zonas dentro del propio ámbito del Pepri». Recalcó, además, que es importante «perfeccionar el sistema de accesibilidad; no se trata de que, por ejemplo, suban todo tipo de coches, pero sí que pequeños vehículos puedan circular sin problemas». Otro de los aspectos que destacó Sáez es que «es imprescindible que no se pierdan las comunicaciones transversales de las calles», pues en Sa Penya, según comentó, hay «unos pasillos que comunican calles con otras que se han tapado por motivos de seguridad».