El Govern ha asegurado, este martes en la sesión plenaria del Parlament, que rechaza las prospecciones petrolíferas planteadas en las aguas de Eivissa y Menorca y, además, ha anunciado que han conseguido que se realice una evaluación del impacto ambiental.
En una comparecencia, el conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, Biel Company, ha lamentado que llegan «tarde» y ha insistido en que las competencias para detener esta actividad dependen de Madrid.
En este sentido, ha aseverado que desde el Gobierno central no pueden detenerlas ya que, según ha insistido, si lo hicieran podrían incurrir en «prevaricación», motivo por el cual, ha dicho, se tiene que intentar «minimizar» las consecuencias.
Así, Company ha explicado que en diversas ocasiones el actual Ejecutivo autonómico ha mostrado su rechazo a los Ministerios de Medio Ambiente y Energía e Industria porque esta actividad «no tiene nada positivo para Baleares».
Por su parte, el diputado del PSIB Joan Boned ha criticado las iniciativas del Govern al respecto y ha considerado que «minimizar los efectos no es suficiente». De esta manera, ha lamentado que si las prospecciones dan resultados positivos «nadie moverá un dedo en Madrid para revertir la situación».
Además, ha coincidido con Company en que «se llega tarde» y en que «la situación es preocupante» y, además, ha censurado que muchos cargos del PP, no sólo en Baleares, «juraron y perjuraron que si ganaban, este problema dejaría de existir».