La Policía Local de Vila prevé llevar a cabo un primer intento de desalojo de los ocupantes ilegales de calles Alt i Retir de sa Penya la semana que viene. Durante estos días, los agentes están notificando las órdenes de desahucio a las familias que siguen ocupando las infraviviendas expropiadas por el Ayuntamiento de Eivissa y, según ha podido saber este periódico, la próxima semana prevén personarse en las viviendas para pedirles que las abandonen. Si este primer intento fracasa, el Consistorio recurrirá a la vía judicial para acometer el desahucio forzoso.
Se trata del último paso del largo procedimiento administrativo para desalojar la manzana más degradada y conflictiva de sa Penya, denominada en el plan urbanístico de Vila como la Unidad de Actuación 27 (UA-27), cuya tramitación comenzó con el inicio expediente de expropiación de las 35 infraviviendas de la zona, en julio de 2010.
El concejal de Urbanismo, Alejandro Marí, aseguró ayer que es complicado contabilizar los ocupantes ilegales que aún residen en esta manzana, una información que recabará la Policía Local con sus actuaciones de notificación e intento de desalojo. El resultado serán actas policiales que servirán para conocer «en qué estado están las vivienda» y para trasladar al juzgado la necesidad de efectuar los lanzamientos.