El juez del caso Nóos, José Castro, ha iniciado los trámites para organizar la declaración como imputada el próximo 8 de febrero de la infanta Cristina, una comparecencia que prevé grabar en vídeo, como se ha hecho en situaciones similares.
El Juzgado de Instrucción número 3 de Palma prepara ya la comparecencia judicial de la hija menor del Rey, que, en principio, se celebrará en la misma sala de los juzgados de la capital en la que declaró su esposo, Iñaki Urdangarin, en febrero de 2012 y de 2013.
Aunque la primera de esas dos declaraciones del duque de Palma fue transcrita por funcionarios del juzgado, en la segunda ocasión se optó por grabarla en vídeo para agilizar el procedimiento, ya que la declaración escrita debe ser repasada y validada por el imputado, algo que supuso una notable demora.
Por ello, y como se ha hecho en otras comparecencias de esta causa, en el caso de la infanta el juez ha puesto en marcha el procedimiento habitual para registrar la declaración de doña Cristina en soporte audiovisual.
Al contrario que con las transcripciones por escrito, la grabación de vídeo no se pone a disposición de las partes sino que queda bajo custodia del propio juzgado, que permite su consulta a las personas legitimadas para ello solo en sede judicial y bajo supervisión.
Pasados unos días, la declaración es transcrita de manera literal para facilitarla a las partes que la requieran.
No obstante, la defensa de la infanta podría solicitar que se modifique la fórmula planteada inicialmente por el juez ante el temor de que la grabación se acabe filtrando, solicitud a la que habrá de responder el juez instructor.