Los vecinos de Sant Antoni echaron ayer la vista al campo para participar de manera masiva en las numerosas actividades que había programado la cooperativa agrícola de la localidad. La jornada empezó con la celebración de la décima edición de la Sant Antoni Rural, con un almuerzo a base de productos locales, actividades artesanales y varias exposiciones de artesanía y maquinaria agrícola. Antes de la torrada, y para abrir boca, se celebró una exhibición de ball pagès, una llaurada pagesa mientras los más pequeños podían disfrutar de paseos en ponny y carros.
Tras la contundente comida llegó el turno de la tercera edición de es Verro Olímpic, una carrera rural, donde los participantes (muchos de ellos disfrazados) tenían que sortear una serie de obstáculos. La lluvia, siempre buena para el campo, ayudó a que los participantes se llevaran a casa un bonito recuerdo del barro del campo sanantoniense.