La gran superficie que Mercadona prevé instalar en Sant Antoni tendrá una sala de ventas de 1.900 metros cuadrados y un aparcamiento para 200 plazas. Será el segundo establecimiento que la cadena de alimentación inaugurará en la Isla y tendrá un modelo estándar, similar al supermercado de la empresa ubicado en Sa Carroca.
Aunque el Ayuntamiento de Sant Antoni aún está tramitando la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que permite la instalación de grandes superficies y aún se desconoce cuánto se retrasará la aprobación definitiva del documento, actualmente en fase de alegaciones, la cadena alimentaria mantiene el objetivo de abrir este mismo año. Preguntada por esta cuestión, la portavoz de Mercadona aseguró ayer que ya se ha presentado ante el Consistorio la solicitud de la licencia de actividad y de obra para edificar el nuevo centro comercial y que, más allá de las previsiones, los trabajos se iniciarán cuando se concedan los permisos necesarios.
Limpieza del solar
En cuanto al resto de las autorizaciones, desde Mercadona informaron que ya cuentan con la licencia de uso comercial que concede la Direcció General de Comerç y que la parcela donde se ubicará, localizada junto a la rotonda del instituto de Quartó de Portmany, en Can Coix, está calificada como de «uso comercial» y está ubicada en «suelo urbano consolidado». Según destacó la portavoz, el proyecto ya cuenta con una licencia de movimiento de tierras y muros de contención y aseguró que en febrero se iniciará la limpieza y el desbroce del solar.
Cabe recordar que este proyecto cuenta en la actualidad con la oposición de los concejales de Es Nou Partit de Sant Antoni (PI-Eivissa), que, en concreto, critican que el Consistorio quiera aprobar de urgencia una modificación del plan general cuando está en marcha la revisión de normas subsidiarias. El grupo ecologista GEN-GOB también denunció que la modificación de la normativa está hecha a la carta para las grandes superficies.