El juez instructor del ‘caso Nóos', José Castro, ha accedido a la petición formulada por los abogados de la infanta Cristina y su declaración solo será grabada en audio, no en vídeo, una decisión del magistrado que no comparten ni Diego Torres ni la acusación popular –Manos Limpias– que la califican de «trato discriminatorio».
Además, con el objetivo de que ni la imagen ni el sonido de la testifical de la hija del Rey pueda ser obtenida «fuera de los cauces habilitados para ello», el juez ha prohibido «terminantemente» el acceso al edificio judicial a personas que lo hagan con terminales telefónicos, tabletas y ordenadores portátiles.
El propio titular del Juzgado de Instrucción 3 de Palma se incluye en esa medida preventiva, y también la extiende al fiscal anticorrupción Pedro Horrach.
«Es de aplicación a todos aquellos que, por razones justificadas por supuesto, accedan al edificio, con la sola excepción de los funcionarios adscritos al servicio de guardia, ya sean los del propio Juzgado de Instrucción 8 que lo presta, los de la Fiscalía o de la Clínica Médico Forense», precisa la resolución del juez.
Actuación judicial
Castro señala que antes de resolver como lo ha hecho, recabó el criterio de la secretaria del juzgado, ya que por ley le corresponde la documentación de las actuaciones judiciales, y ella es del mismo parecer, según el juez.
Por ello, «la declaración de Cristina de Borbón y Grecia solo se grabará en soporte de audio del que no se entregará copia ni al Ministerio Fiscal ni a ninguna de las partes, aunque sí su transcripción cuando se obtenga», precisa el magistrado.
Castro recuerda que la petición formulada por la defensa de la esposa de Iñaki Urdangarin la atiende de la misma manera que si la hubiese interesado «cualquiera otra parte». En ese contexto, señala que ya se ha accedido a que determinadass declaraciones no fueran grabadas ni en audio ni en vídeo.