El conseller de Medi Ambient, Biel Company, y el secretario de estado de Medio Ambiente, Federico Ramos de Armas, ya han firmado la modificación del convenio de colaboración entre el Govern y el Ministerio de Medio Ambiente para la ejecución de determinadas obras hidráulicas en Balears, entre las que se encuentra la interconexión de las desaladoras de Eivissa. De esta manera, en un plazo no superior al año se garantiza el suministro idóneo de agua para toda la isla.
El convenio que ha sido firmado por ambos gobiernos también contempla la construcción de las arterias de la desaladora de Formentera, así como la conducción a las redes de distribución de la pitiusa menor.
Gracias a la firma de este documento, el Govern ya tiene los 1,6 millones de euros necesarios para terminar el anillo que interconecte las desaladoras de Vila, Sant Antoni y Santa Eulària.
Las obras están paralizadas desde 2011 y solo falta la instalación de algunos tramos del ramal norte (hacia Sant Joan) y del ramal sur (hacia Sant Josep), así como el acondicionamiento de los depósitos. Sin embargo, esta interconexión conseguirá que no haya restricciones ni problemas de agua en ningún punto de la isla, una situación que sí se producía en la actualidad.
Este verano, por ejemplo, se ha tenido que recurrir a pozos subterrráneos que no cumplían los mínimos de calidad que exigen los consumidores. En algunas zonas de la isla el agua era totalmente marrón. Con esta interconexión, cuando falte agua en un municipio la desladora del municipio podrá aportar lo que se necesite.
El objetivo ahora es que las obras estén listas para el próximo verano, que es cuando se produce la mayor punta de consumo en Eivissa, con una población que se multiplica por dos. En invierno, en cambio, el problema de suministro es nulo y hay agua suficiente para los residentes. Fuentes del gabinete autonómico se mostraron optimistas en que las obras terminen durante el verano, si bien no supieron determinar con rotundidad si será posible. No obstante, la puesta en marcha de la planta de Santa Eulària es fundamental para garantizar todo el suministro de cara al futuro.