La asociación de vecinos de es Fornàs denunció ayer un proyecto de Red Eléctrica Española consistente en la instalación de una línea aérea de alta tensión de 11 kilómetros en esta zona rural del municipio de Sant Antoni. Los vecinos aseguraron que la eléctrica está actuando de forma «clandestina», ya que nadie les ha informado de esta obra, a pesar de que «ya ha comenzado la instalación de estacas en distintas fincas por parte de los topógrafos, que se ha realizado sin permiso de sus propietarios».
El presidente de la asociación, Pere Juan, sostiene que la instalación de esta línea de alta tensión afectará a más de 50 fincas rústicas protegidas y supondrá «destruir uno de los paisajes mejor conservados de la isla», por lo que reclaman a Red Eléctrica que «paralice el proyecto para buscar una vía alternativa que evite una catástrofe ambiental». De esta forma, los vecinos proponen el soterramiento de toda la línea y que el proyecto transcurra por «el vial de servicio de la carretera de Sant Antoni, así como se hizo la construcción del gasoducto de Gas Natural».
Proyecto
Esta inversión está incluida dentro de un plan estatal para mejorar la red de transporte eléctrico de Eivissa, en la que está prevista la construcción de una nueva línea de doble circuito de 132 kV y unos 11 km de longitud, de los que 7 km son aéreos, entre las subestaciones de es Torrent y de Sant Antoni. No obstante, desde Red Eléctrica explicaron ayer que no ha empezado la tramitación y que todavía no existe ningún proyecto. Referente a las estacas instaladas, aseguraron que se está realizando un «trabajo topográfico» para analizar la viabilidad del terreno y estudiar las diferentes alternativas. Tampoco pudieron asegurar la destrucción de más de 50 fincas rústicas protegidas, tal como denunciaron los vecinos, porque «no hay un proyecto» y antes de sacarlo adelante tendrá que contar con la aprobación de diferentes organismos. De todas formas, recordaron que se trata de una línea «necesaria» para garantizar el suministro del servicio y para hacer frente a las puntas de demanda que se producen, sobre todo, en verano. Además, explicaron que también contribuirá a reforzar el mallado de la red de transporte de la isla y a su adaptación al futuro suministro de la interconexión submarina entre Mallorca y Eivissa.
Los vecinos recordaron que es Fornàs es una zona protegida por la legislación estatal e insular, ya que en su interior «conviven fincas declaradas suelo rústico protegido (SRP) con zonas boscosas declaradas ANEI (Área Natural De Especial Interés) y AANP (Área de Alto Nivel de Protección)». Además, de contar con zonas anexas incluidas en la Red Natura 2000.
Pere Juan, que aseguró que a la eléctrica no le interesa dar a conocer la línea hasta que pasen las elecciones, señaló que el PTI contempla que todo el mundo tiene que soterrar los tendidos aéreos, pero es «débil» porque da «carta blanca» para que cualquier plan director del Estado intervenga «haciendo lo que quiera, incluso líneas aéreas».
Visita
Desde el Ayuntamiento de Sant Antoni anunciaron ayer que pedirán que un técnico de la conselleria balear d'Indústria realice una visita a la zona de es Fornàs junto a los vecinos, a pesar de que ha constatado que «no hay ningún proyecto en marcha de Red Eléctrica en esta zona», según la información que les ha facilitado la conselleria. Además, apuntaron que la alcaldesa, Pepita Gutiérrez, ya ha trasladado las peticiones de los vecinos al director general d'Indústria del Govern, Jaime Ochogavía, tal como se comprometió hace una semana en una reunión mantenida con la asociación, en la que reclamaron la «no aceptación de las nuevas líneas aéreas de alta tensión».