Un total de 29 municipios de Baleares, entre los que se encuentran Santa Eulària y, por primera vez Sant Joan, contarán este verano con el Servicio Policial de Atención al Turista, en el que trabajarán 54 agentes en la prevención de los delitos que más afectan a los turistas entre hoy, 1 de junio, y el 30 de septiembre.
Este año, los 29 municipios de las islas que contarán con el servicio dispondrán de 54 agentes repartidos de la siguiente manera: 44 policías en 20 municipios de Mallorca; siete agentes en las siete localidades de Menorca que dispondrán del servicio y tres policías para los municipios ibicencos de Sant Joan y Santa Eulària.
Proyecto piloto
El SPAT se aplicó como proyecto piloto en el verano de 2013 en el municipio de Andratx. Tras el excelente resultado obtenido, el año pasado se implantó en 19 municipios más: Alcúdia, Bunyola, Costitx, Deià, Esporles, Maria de la Salut, Pollença, Son Servera, Santa Margalida, ses Salines, Sóller y Vilafranca de Bonany en Mallorca; Alaior, Ciutadella, Ferreries, es Castell, Mahón y Sant Lluís en Menorca y Santa Eulària en Eivissa.
Este verano, el Servicio Policial de Atención al Turista se ha ampliado a otras ocho localidades que son Estellencs, Inca, Mancor de la Vall, Muro, Porreres y sa Pobla, en Mallorca; es Mercadal en Menorca y Sant Joan de Labritja en Ibiza.
Los objetivos del servicio son la prevención de los delitos que más afectan al turista, la mejora de la labor informativa y de asesoramiento a los turistas de manera personalizada, la mejora de la relación continua con los establecimientos turísticos y el refuerzo de la coordinación entre los diferentes cuerpos de seguridad.
El programa SPAT se saldó con 9.839 actuaciones en 2014 y 31.512 horas de vigilancia específicas para garantizar la seguridad en las diferentes zonas turísticas.
Entre la totalidad de las actuaciones desarrolladas, 1.878 se refirieron a accidentes de tráfico o intervenciones por infracciones en los que se vieron implicados turistas; 4.078 estuvieron relacionadas con venta ambulante, realización de actividades sin licencia, seguridad en las playas o quejas por ruidos, entre otras.