La iniciativa SOS H2O convocó ayer en Sant Jordi una asamblea informativa abierta para dar a conocer sus actuaciones desde la fundación de la plataforma, el pasado mes de mayo, para reclamar un uso más racional del agua.
Según explicó uno de sus impulsores, Jordi Serra, durante este verano la actividad principal ha sido realizar un primer contacto con diferentes sectores representativos, así como instituciones a nivel insular, y el objetivo ahora es «formar una mesa permanente de trabajo en la que participen los técnicos de los diferentes sectores involucrados».
En la reunión se citaron a particulares y asociaciones cívicas y vecinales para informar de los próximos pasos a seguir por parte de SOS H2O, así como conocer sus impresiones y recoger nuevas propuestas de actuaciones y de organización en una de las zonas más castigadas por la sequía y la mala gestión de las aguas como es Sant Josep.
Según explicó Jordi Serra, la iniciativa SOS H2O «más que propuestas se fija unos objetivos: que el ciclo del agua se gestione en base a la Directiva marco de la Unión Europea sobre el agua». «Estamos preocupados porque no se está cumpliendo y esto tiene consecuencias nefastas como las que se están viendo», precisó el portavoz de la plataforma, que considera fundamental «un proceso participativo» para abordar cualquier aspecto relacionado con el agua y su planificación.
La directiva marco europea sobre las políticas del agua, que data del año 2000 y tiene validez hasta diciembre de este año, «va encaminada a ver el agua como algo más que un recurso; como un valor ambiental y estratégico», apunta Serra.
En concreto, esta directiva marco persigue varios objetivos, tales como la prevención y la reducción de la contaminación, la promoción del uso sostenible del agua, la protección del medio ambiente, la mejora de la situación de los ecosistemas acuáticos y la atenuación de los efectos de las inundaciones y de las sequías. Su objetivo último es alcanzar un buen estado de todas las aguas de la Unión Europea para 2015, algo que para Jordi Serra «no se ha conseguido en Eivissa». «La iniciativa ha tenido una buena acogida porque la gente está bastante preocupada con este tema y tenemos que buscar soluciones conjuntas», concluyó.