Dos horas de intensa lucha contra el fuego en un garaje donde se almacenaba maquinaria agrícola y material altamente peligroso como botellas de butano, bidones de gasolina y dos cocinas. Es el escenario al que se enfrentaron ayer por la tarde los bomberos que acudieron a extinguir un incendio en el garaje de una finca localizada en el camí des Puig Blanc, en Sant Josep. Hasta el lugar del incendio se desplazaron dos vehículos con un cabo y cuatro bomberos que tuvieron que utilizar equipos autónomos de respiración.
El fuego arrasó el garaje de 32 metros cuadrados pero evitaron que las llamas afectasen la vivienda unifamiliar que se encontraba a seis metros del garaje donde se desencadenó el fuego.
Según explicaron fuentes de Bomberos de Eivissa, la extinción fue muy complicada porque las llamas «estaban muy cogidas». Una vez extinguidas las llamas, los bomberos utilizaron un ventilador para evacuar el humo.