El Grupo Popular en el Ayuntamiento de Sant Antoni expresó ayer su «total y absoluta sorpresa e incredulidad» por el hecho de que la directora de Seguridad del Consistorio, María Ángeles Gallardo, «lleve un mes contratada de forma ilegal, tal y como el propio equipo de gobierno confesó y reconoció en el pleno, de lo que incluso hay constancia videográfica, sin que el hecho haya tenido ninguna repercusión legal».
Según señalaron en un comunicado, «en casos similares, incluso ha habido investigación de oficio de las presuntas irregularidades, que por el momento no se ha producido en esta ocasión». Además, según el PP, esta contratación «ilegal e innecesaria» costará anualmente a las arcas municipales 59.985 euros, «un dinero con el que se podría mejorar la seguridad con la contratación de nuevos policías que pudieran patrullar las calles del municipio».
«En una legislatura en la que, por primera vez en la historia, hay 13 concejales, la mayoría de ellos trabajando con dedicación exclusiva, sorprende que la señora Alcaraz necesite asesoramiento y que dicho asesoramiento se tenga que hacer desde el cuartel de la Policía Local y ocupando el puesto del jefe», criticaron los populares. Añadieron que en un pleno solicitaron el currículum de Gallardo «y nos dijeron que no lo tenían, algo que sorprende porque es lo primero que se pide a alguien al que se le va a dar trabajo». En este sentido, apuntaron que pasado un mes desde la contratación, todavía no han recibido dicho currículum.
Asimismo, el Partido Popular portmanyí criticó la «mala gestión» de la Policía Local por parte de la concejala Aída Alcaraz. Una «pésima gestión» que ha causado, según el PP, la desaparición de la Unidad de Menores y de 6.000 euros anuales de los Fondos de Seguridad del Govern Balear. Para los populares, otro ejemplo de la «mala gestión» de la concejala de Gobernación ha sido el hecho de que se «hayan dejado de cobrar, como mínimo, las multas interpuestas por los agentes municipales durante los meses de mayo y junio». Según aseguran, Alcaraz «se olvidó» de dar la orden necesaria para que se tramitaran informáticamente dichas denuncias, por lo que prescribieron. También lamentaron el «desprecio» que, según el PP, viene sufriendo el Jefe de Policía, Javier Verdugo.