El Teatro Pereyra da otro pequeño paso adelante en el interminable proceso de rehabilitación que este edificio centenario de Vila, de finales del siglo XIX, comenzó hace seis años para devolverle su esplendor del pasado. Después de una larga espera, los propietarios del teatro, el Grupo de Empresas Matutes y Sirenis Hotels, obtuvieron la licencia de rehabilitación en el año 2010 aunque los trabajos se tuvieron que parar tres años después al encontrar en el transcurso de la obra unos restos de época púnico-romana.
Prórroga de la licencia
El Ayuntamiento de Vila concedió hace unas semanas una prórroga de la licencia de rehabilitación a los dueños del histórico teatro que tiene una duración de 12 meses, durante los cuales se tratará de avanzar especialmente en la recuperación exterior del edificio.
El empresario Pedro Matutes, portavoz de la propiedad, explicó al PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA que los trabajos están centrados en estos momentos en el cierre de la cubierta central del edificio y en la rehabilitación de diferentes zonas de la fachada, especialmente en la parte exterior del edificio ubicada en la calle Pere Sala, cuyos muros se están rehabilitando en su totalidad.
En breve, se procederá a retirar la gran grúa que está situada en el interior del teatro y, si se cumplen las previsiones, estos trabajos estarían terminados probablemente antes del inicio de la próxima temporada turística.
«Queremos dejar el edificio en buenas condiciones estéticas a la espera de poder disponer de todo el edificio», afirmó Matutes. De hecho, en la actualidad hay todavía dos locales abiertos en los bajos del antiguo teatro, un supermercado y una cafetería. El contrato de arrendamiento de este último establecimiento acaba, según señaló el portavoz de la propiedad, en un plazo de dos años. A partir de ese momento, los propietarios del Pereyra tendrán luz verde para acabar el futuro complejo cultural.
Pedro Matutes subrayó que la recuperación de la estructura del teatro está muy avanzada, así como la de los palcos, los escenarios y los forjados internos.