La junta de gobierno del Ayuntamiento de Sant Antoni de Portmany ha aprobado imponer una sanción de 12.001 euros a un local situado en la zona de Caló des Moro, que en agosto de 2014 infringió la Ley 1/2007 contra la contaminación acústica de Baleares.
Según han informado fuentes municipales, la infracción consistió en incumplir los valores sonoros permitidos para dicho establecimiento, ya que se apreció una diferencia de 16,6 decibelios entre el valor medio y el valor permitido.
El hecho denunciado se encuentra tipificado como infracción muy grave en el artículo 55 de la mencionada Ley y la sanción incluirá también el precinto de los aparatos musicales existentes en el local infractor por un periodo de dos años.