El Ayuntamiento de Eivissa ha habilitado un tramo de 360 metros de la playa de es Viver entre las calles Quartó de Balançat y Quartó de Santa Eulària des Riu en el que se permite el baño y la presencia de perros durante todo el año.
La concejala de Medi Ambient, Montse García, explicó ayer que esta iniciativa, autorizada por un bando municipal desde el pasado sábado, responde a las numerosas peticiones recibidas para disponer de un trozo de playa donde pasear a los perros en plena temporada, periodo en que las ordenanzas municipales prohíben su uso, ya que durante el resto del año sí se permite la presencia de animales a excepción de los fines de semana y los festivos.
Según García, los operarios municipales de la limpieza han recogido los cristales que había en la zona y los jardineros han recortado los setos y, a partir de ahora, lo harán dos veces por semana. También recogerán los excrementos que haya sobre la arena, aunque el Ayuntamiento obliga a sus propietarios a recogerlos y depositarlos en las papeleras habilitadas.
Además, están obligados a llevar el perro hasta la playa atado, a llevar la documentación reglada del animal y a controlarlo en todo momento. En caso de incumplimientos, la ordenanza sobre tenencia y protección de los animales contempla sanciones que oscilan entre los 100 y los 3.000 euros.
Yolanda, una de las primeras usuarias de la playa para perros, explicó que ya solía pasear a su mascota en este trozo de costa «aunque te arriesgabas a que te multaran». Pidió que se instalaran más papeleras y se habilitaran más tramos de playa en el municipio con mayor amplitud que este de es Viver. «Aquí hay poco espacio y el perro no puede correr. Además, nos gustaría que hubiera más arena porque esto es zona de rocas y hay muchos cristales», añadió.
Por otra parte, los voluntarios del Centre de Protecció Animal de Sa Coma podrán pasear los perros en esta zona el primer sábado de cada mes.