El Ayuntamiento de Santa Eulària ampliará su oferta de accesibilidad universal en la playa de Cala Llonga a partir de la próxima temporada. Con ello, se convertirá así en la segunda playa del municipio, junto a la de Santa Eulària, que opta por la realización de mejoras en el acceso para los residentes y visitantes.
La consejera de Medi Ambient i Sostenibilitat del Ayuntamiento de Santa Eulària, Antonia Picó, explicó que el objetivo es hacer de Cala Longa un punto más accesible para certificarla como zona de accesibilidad universal. Los motivos de llevar a cabo este proyecto de accesibilidad en esta zona se deben, como así comentó Picó, al «buen entorno» que hay en este lugar y a su «oferta de turismo familiar».
Incio del proyecto
Las obras de mejora en cuanto a la accesibilidad de la playa de Cala Llonga comenzarán a finales de temporada para evitar la aglomeración de bañistas en la zona. Con ello, Picó anunció que tienen previsto terminar el proyecto durante el mes de junio del próximo año.
El proyecto se iniciará desde los aparcamientos reservados a las personas con discapacidad, conectando con las pasarelas principales hasta llegar a la propia playa. Además, se ampliará el número de plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida, instalación del baño asistido, timbres inalámbricos, zona de sombra con asientos y sillas anfibias para que aquellas personas que lo necesiten puedan bañarse sin ningún tipo de inconvenientes. También, contará con dos nuevos socorristas para garantizar la asistencia permanente a los bañistas de la playa de Cala Llonga.
Con estas nuevas instalaciones en cuanto a la accesibilidad, Picó prevé que para los próximos años estas mejoras en el acceso a las personas se trasladen también a otras playas y calas del municipio de la Villa del Río, como es el caso de «Es Canar o Cala Llenya».